Funcionarios del Ministerio Público salieron al cruce luego de que la mandataria dijera por cadena nacional que «se queda con el canto y la alegría» e insistió que la marcha del 18 de febrero por la muerte del fiscal Nisman es un acto político.
El silencio vale más que mil palabras». Con esa frase le respondieron a la presidenta Cristina Kirchner los fiscales que convocaron a la marcha por la muerte de Alberto Nisman.
La mandataria había criticado el miércoles a la noche a los funcionarios judiciales que organizaron la movilización para el 18 de febrero y a los dirigentes de la oposición que se fueron sumando.
«Nosotros nos quedamos con el canto y a ellos les dejamos el silencio», dijo ante la militancia kirchnerista que colmaba los patios de la Casa Rosada donde anunció el aumento del 37,25% de la ayuda escolar.
«Es porque no tienen nada que decir o porque no pueden decir lo que piensan», insistió.
«Somos el amor por la Patria, el amor por el otro. Dejemos que los demás tengan odio. El odio termina enfermando», expresó y aseguró que «ya no hay espacio político para que nadie venga a darnos consejos».
Y finalmente, apuntó contra quienes critican el memorándum firmado con Irán con el que el Gobierno aseguraba que la Justicia argentina podría avanzar sobre los acusados de cometer el atentado a la AMIA en 1994. «Nos quieren marcar la cancha y decir los países que nos convienen tener de amigos o no amigos, aliados o no aliados», enfatizó.
El acuerdo, firmado por el Ejecutivo y ratificado por el Congreso con un fuerte rechazo de la oposición y de algunos sectores de la comunidad judía, es uno de los puntos sobre los que se basó Nisman para denunciar a Cristina por «encubrimiento» en la causa AMIA.
El fiscal apareció muerto en su departamento del Le Parc con un tiro en la cabeza un día antes de ampliar su acusación contra la mandataria ante el Parlamento.
Ante este hecho que conmocionó la política y a la Justicia es que los fiscales organizaron la marcha del #18F.
Luego de las críticas de Cristina, los letrados salieron a cruzarla e insistieron que en que no será una manifestación «partidaria».
El fiscal federal Guillermo Marijuan expresó que «no es una marcha contra nadie» y que «no se gestó por ningún político», sino que «surgió de la comunidad judicial».
En tanto, Carlos Stornelli aseguró que «se quiere ejercer la libertad de expresión» y aclaró que la marcha «no tiene intención política».
Más tarde, el secretario general de la Unión de Empleados Judiciales, Julio Piumato , dijo que«un silencio vale más que mil palabras» y que «quieren» que sea «el mejor homenaje» para Nisman y para la familia, que «no tuvo» las condolencias correspondientes.
Además aseguró que «se sabe que hay gente del Gobierno» que pensaba asistir a la marcha, e insistió en que «ese silencio debe ser masivo».
Mientras que su compañero, Carlos Rívolo expresó que son «conscientes» de que la marcha es un «hecho político» pero que no es «político partidario», porque «no son» oficialistas ni opositores.
Rívolo aseguró que no «marchan por Justicia» porque ese «trabajo es de la doctora (Viviana) Fein «, pero remarcó que «la muerte del fiscal merecía un homenaje», y que el cuerpo de fiscales busca «rendir un tributo» y la «mejor palabra que se ajusta es el silencio».