«Pablo está con unas ganas bárbaras»

Ricardo Aimar, el papá del Payaso, le cuenta a Olé Cómo está su hijo. Y revela: “Si en la pretemporada no se siente bien, le dirá a Gallardo ‘no me da el cuero’. Es muy sincero”.

¿Qué piensa Pablo Aimar? Reservado, callado, no muy amigo de los micrófonos, menos amigo de las cámaras: es difícil saber lo que piensa Pablo César.

Figurita difícil para el periodismo, para acceder a los pensamientos del Payaso hay que buscar por otro lado: amigos, familia, los únicos que lo junan bien. Y probablemente nadie june mejor a Aimar que Aimar. Su viejo. Ricardo Tomás Aimar: padre de Pablito, Andrés y Laura, Don Aimar es quien más conoce al diez. Y el que blanquea que su pibe se muere por volver a vestir una banda roja que le cruzó el alma en sus comienzos y que ahora, si todo sale bien en la pretemporada, volverá a caérsele desde un hombro hasta la cintura, catorce años después.

“El se quiere poner a punto. Tiene muchas ganas de volver a jugar en River. Va a ver cómo responde en la pretemporada y después va a decidir”, le dice a este diario Ricardo, otro jugador de fútbol que llegó a jugar en Newell’s, Belgrano y el Estudiantes de Río Cuarto que vio nacer a sus dos hijos varones. Y mientras se escucha el ruido de un tractor de fondo al otro lado del teléfono, Ricardo le cuenta a Olé desde el campo (“a 10 minutos de la ciudad”, ubica) que la familia está chocha, aunque él hubiera querido que Pablo colgara los botines y se fuera a vivir con ellos a su tierra cordobesa: “En la familia estamos todos muy contentos. Yo quería que se viniera a vivir a Río Cuarto para disfrutar de mis nietos, que ya están grandes. Pero después de 15 años en Europa, Pablo está muy ilusionado. Lo convencieron entre Francescoli y D’Onofrio, y después lo habló con Gallardo. Esperemos que le vaya muy bien”. Bueno, Pablo todavía no se irá a vivir a Río Cuarto como tenía pensado desde hace años (siempre dijo que se iría a su ciudad cuando se retirara), pero sí está allí en estos momentos: viajó ayer para pasar las Fiestas en su casa. El Payaso se quedará hasta el principio de enero, cuando tenga que viajar a Baires para presentarse el 4/1 en el Monumental y viajar a Punta del Este. Esa pretemporada será la que termine de definir su semestre: si se siente bien, los hinchas ya tendrán los primeros motivos para festejar en 2015. “El tema es ver cómo responde de la operación en el talón. Va a hacer la pretemporada y si está bien, arranca. Y si se siente mal, le dirá a Gallardo ‘no me da el cuero’. El es muy sincero y no va a andar con vueltas. La semana pasada fui con mi señora a visitarlo a Buenos Aires y lo vi muy bien, con unas ganas bárbaras de empezar la pretemporada. Está muy ilusionado con volver y con el equipo, con todo lo que hizo en este semestre”, explica su viejo. Y remata como el portavoz de toda la familia Aimar: “Para todos será una gran alegría si se pone otra vez la camiseta de River”. Para la gente también.

Fuente Olé