Erviti o ninguno

Aunque los dirigentes avisaron que la novela está terminada, Falcioni insiste con su jugador preferido y dice que no existe otro en carpeta. ¿Y entonces?

No se resigna, no se da por vencido. A Julio Falcioni no le entra en la cabeza no tener a Walter Erviti para terminar de armar a un Boca a su medida. Lo dijo el sábado antes y después del debut ante Independiente, lo sigue pensando, y nada lo va a hacer cambiar. Ni los cuestionamientos de Carlos Portell ni lo difícil que aparece la transferencia. Y encima, caída la posibilidad de que llegue Pablo Guiñazú como alternativa y con el préstamo de Matías Giménez a San Lorenzo, ¿quién viene para jugar por la izquierda si no es Erviti? “Si no es Walter, no hay otro nombre”, dice el DT.

Para calmar un poco las aguas, la decisión dirigencial fue salir a decir que lo de Erviti es un caso cerrado. Lo dio a entender el presidente Jorge Ameal el sábado y ayer, también, el vice José Beraldi. Porque no quieren generar más tensión en Banfield, como sucedió con la incorporación demorada del jugador a la pretemporada y la cancelación de la conferencia de prensa de ayer. Por otro lado, entre el sábado y ayer, Boca estiró la oferta de dos a dos millones y medio de dólares, y eso es consecuente con el deseo del técnico. Pero el número sigue siendo insuficiente para Portell.

Con Guiñazú como una historia terminada, los otros dos nombres que aparecieron en Boca fueron los de Sebastián Leto (Panathinaikos) y del Cebolla Rodríguez (Porto), pero las cifras para traer al país a cualquiera de estos dos jugadores resulta muy elevada. “Con las características que pide el técnico, como las de Erviti y Guiñazú, no hay muchos”, analizó un dirigente. Por el momento, sin embargo, seguirán en busca de un nombre que conforme a Falcioni, si es que logra sacarse de la cabeza a su ex dirigido.

El otro jugador al que sigue esperando JC es delantero, también fue su dirigido en Banfield y se llama Darío Cvitanich. Es el otro nombre que el DT tiró sobre la mesa no bien llegó al club y por el que aguardan novedades del Ajax de Holanda. “En estos días debería haber una respuesta, pero es muy difícil”, dicen en Boca. De no concretarse esta posibilidad, Pablo Mouche se quedaría con el puesto, ya que conformó al nuevo entrenador en las prácticas y el sábado.

“Si llega un volante por izquierda y un delantero, no hay cupo para un arquero”, ya avisó Falcioni, dejando a la vista sus prioridades.

Fuente: Olé