El presidente venezolano, Nicolás Maduro, informó que solicitarán con código rojo a los países del continente la extradición de los sujetos implicados en el asesinato del diputado Robert Serra y su compañera, María Herrera, el pasado 1 de octubre en la residencia del parlamentario socialista, ubicada en la ciudad de Caracas.
«He solicitado y estoy haciendo todas las gestiones para la máxima colaboración de todos los gobiernos del continente, incluyendo el gobierno de Estados Unidos, al cual le voy a aportar todas las pruebas de los grupos terroristas que pretenden operar en Venezuela», afirmó el mandatario desde el Palacio de Miraflores, donde reveló la identidad de los autores materiales de este crimen.
El presidente anunció que igualmente pedirán a la Interpol la activación de una alerta roja para el proceso de búsqueda nacional e internacional del sujeto identificado como Padilla Leyva, alias «El Colombia», encargado de coordinar «de manera meticulosa» el doble homicidio.
El jefe de Estado venezolano indicó que ocho personas participaron en el asesinato de Serra y Herrera, y aseguró que la operación fue dirigida por un paramilitar colombiano, a quien las autoridades «están por identificar desde el punto de vista legal».
Maduro indicó que este criminal utilizó a una banda llamada Organización Paramilitar El Colombia, liderada por Padilla Leyva, quien habría convencido a Torres Camacho, alias «El Poli», jefe de los escoltas del parlamentario socialista.
«Quien lo contrató de manera directa es alias ‘El Colombia’, él consigue el dinero, contrata y convence al jefe de los escoltas, y es el que dirige todo el proceso de planificación, sobre la base de una gran presión y precisión», manifestó.
Los otros ejecutores del asesinato son Fariñes Palomino, alias «El Eme»; García Martínez Carlos Enrique, alias «Tintín»; Padilla Johny, alias «Oreja»; Salina Quevedo Danny Enrique, y Vegas Hernández Antonio, alias «El Tony».
Maduro detalló que el asesinato de Serra fue planificado de manera meticulosa durante tres meses, y precisó que la operación criminal tardó aproximadamente seis minutos. Asimismo presentó dos vídeos en los que se evidencia la entrada de seis de los criminales a la residencia del diputado minutos antes del suceso.
Señaló que de acuerdo a confesiones del ex escolta del joven legislador, «los sujetos estuvieron la semana anterior haciendo ensayos, chequeos, contra chequeos en el lugar del crimen».
También alegó que desde las autoridades se continúa la búsqueda de los autores intelectuales de este crimen. «Autores intelectuales tengan la seguridad de que a ustedes vamos a llegar», dijo el mandatario.
Informó por otro lado que estos mismos sujetos habían planificado en días anteriores asesinar al vicepresidente para el Area Social, Héctor Rodríguez, y posteriormente, propiciar la muerte del presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello.
«Intentaron asesinar a Héctor Rodríguez pero afortunadamente Dios lo protegió, y dos días después a Diosdado Cabello», expuso Maduro, al tiempo que explicó que el asesinato de Serra y Herrera «forma parte de una cadena de crímenes que se han planificado y que hemos podido disipar a tiempo».
Maduro precisó que el hecho sucede a una serie de acontecimientos denunciados por el Ejecutivo venezolano, los cuales a su juicio, forman parte de «una embestida de violencia» en contra de Venezuela.
Una muestra de ello, dijo, es el asesinato del ex presidente del Concejo Municipal de Caracas, Eliecer Otaiza, además de la denuncia emitida por el alto mando político de la Revolución Bolivariana, el pasado 25 de mayo, en las que se evidenció los planes violentos y desestabilizadores de grupos de la derecha.
Luego señaló que el 4 de septiembre, gracias a gestiones diplomáticas, se logró la captura del joven derechista, Lorent Gómez Saleh, vinculado a planes terroristas en la nación suramericana.
Ante esto, apuntó que en los últimos meses se han identificado la actuación en territorio venezolano de células violentas vinculadas al narcotráfico.
El mandatario precisó que en los próximos días será instalado el Sistema de Protección Popular para la Paz de la Patria, mecanismo de información y acción social que permitirá identificar y frenar el avance de grupos paramilitares en la nación suramericana.
El pasado 1 de octubre, Robert Serra, de 27 años de edad y considerado el parlamentario más joven de la historia venezolana, fue asesinado junto a su compañera, María Herrera, en su casa ubicada en la parroquia La Pastora de la capital.
El suceso conmovió a la población venezolana, así como a dirigentes y movimientos políticos y sociales de América Latina y el mundo, quienes repudiaron el trágico suceso.
El secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), Ernesto Samper, fue uno de los primeros políticos en condenar el crimen y denunciar la actuación de grupos paramilitares colombianos en este doble homicidio.
vanguardia.com