Coincidió con un duro entredicho entre Capitanich y Santiago Montoya, un hombre muy cercano al gobernador
Por Jesica Bossi | LA NACION
Cuando aún seguía el fuego cruzado entre una de las espadas del mandatario bonaerense y el Gobierno por el impacto de la inflación, se produjo una postal inesperada para calmar las aguas: Daniel Scioli y el ministro de Economía, Axel Kicillof, juntos, con casco incluido, visitaron obras en La Plata.
El cortocircuito con la Casa Rosada tuvo como disparador el crudo análisis sobre la suba de precios que realizó Santiago Montoya, presidente del Grupo Provincia y candidato por la gobernación. El cuestionamiento generó la respuesta del jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, que lo ubicó, sin rodeos, «en la oposición».
Ayer, consultado por LA NACION, el funcionario ratificó su postura y fue más allá. «Leo columnas en el diario Tiempo Argentino y también a [Horacio] Verbitsky en Página 12, que se podría decir son allegados al Gobierno, y hablan de inflación. ¿Alguien los calificaría de opositores?», retrucó.
Siempre locuaz, Montoya recordó que hasta en sus charlas con Néstor Kirchner, el santacruceño le permitía divergencias. «No acepto que nadie sea más kirchnerista que Kirchner», completó. Jura que no recibió reproche del gobernador, que busca mostrar más que nunca sintonía con Olivos, sino unas pocas palabras: «Asegurate de ser constructivo y positivo con lo que plantees».
¿Qué había dicho? Que la inflación era «inadmisible» y que los que la pagan «son los pobres». También vinculó la disparada del dólar blue con la emisión monetaria, hecho que el Gobierno rechaza. «Con una emisión importante, los pesos que sobran, ¿a dónde van?», se preguntó retórico, para luego contestar que se vuelcan a la moneda estadounidense.
En el gabinete bonaerense sostenían que el cordobés «se cortó solo» y minimizaban el cruce, una modalidad que caracteriza al sciolismo: cierta autonomía para que soldados propios marquen una diferencia, sin que aparezca el gobernador como rostro visible de la cruzada. «Cada uno tiene la libertad para decir lo que quiere», justificó un vocero. En ese esquema, los dardos aparecen en boca de otros, de los que puede desmarcarse.
De hecho, ayer priorizaban la foto con Kicillof, en una actividad que aseguran se armó hace una semana, por una invitación de Scioli. El encuentro, como si hubiera sido producto de la clarividencia, sirvió para bajarle la espuma al debate por la inflación y le brindó al ex motonauta un aporte inigualable: la oportunidad de mostrar que el núcleo más duro del oficialismo, pese a las resistencias, lo incorpora dentro de su dispositivo.
Con cada vez mayor gravitación dentro del Gobierno y cuando algunos apuestan a que Cristina Kirchner querrá colocar candidatos propios en las listas, hubo lecturas diversas con anclaje en 2015. «Cada vez que Daniel se muestra con un dirigente importante se dice que podría ser su vice. Eso significa que es el candidato de todos», sostuvo, con desmedido entusiasmo, un colaborador del mandatario.
Scioli y Kicillof visitaron el puerto de contenedores que se construye en Berisso y supervisaron obras de saneamiento, la del denominado Arroyo del Gato, y sobrevolaron en helicóptero la zona. Dieron especialmente varias vueltas por el estadio Único de La Plata, justo cuando lo preparaban para el duelo de rugby de hoy entre los Pumas y los All Blacks.
«Scioli le tiene aprecio profesional», lo ensalzaron, para concluir que ambos mantuvieron varias conversaciones en privado. El ministro, cada vez con mayor gravitación dentro del Gobierno, compartió poco más de una hora la recorrida, en un gesto poco habitual dentro de su habitual agenda, de la que también participaron el ministro de Infraestructura, Alejandro Arlía, y el intendente de la capital provincial, Pablo Bruera.
Más allá del esfuerzo por la armonía interna, hay tensiones latentes entre el sciolismo y un sector del universo K. El filósofo Ricardo Forster, que también es secretario de Coordinación Estratégica para el Pensamiento Nacional, volvió a insistir en forjar una opción pura para competir contra el gobernador, según dijo en una entrevista en El Cronista. «Me gustaría que haya candidaturas que representen de una manera más potente lo mejor del kirchnerismo», afirmó. Rápido, lo tacleó el senador sciolista Alberto De Fazio, vía Twitter: «Quiero agradecer públicamente a Ricardo Forster por su invalorable aporte al crecimiento y afianzamiento de la figura de Daniel Scioli». Una ironía que algunos toman muy en serio.
UN IDA Y VUELTA CON VOLTAJE POR LA ECONOMÍA
Santiago Montoya
Grupo Provincia
«La Argentina no puede tener estos niveles de inflación, es inaceptable. Los que pagan son los pobres».
Jorge Capitanich
Jefe de Gabinete
«Probablemente Santiago Montoya se inscriba y se enrole en la oposición».
Santiago Montoya
Grupo Provincia
«Hasta Tiempo Argentino y Verbitsky, que son allegados al Gobierno, hablan de inflación. ¿Acaso son opositores?».
Fuente: LA NACION