Dublín, 22 ago (PL) Autoridades sanitarias de Irlanda descartaron hoy que el ciudadano de ese país fallecido aquí la víspera, a dos semanas de su retorno de Sierra Leona, estuviera infectado con el virus del ébola.
Sus restos habían sido aislados en el depósito del hospital de Letterkenny, en el norte de la nación, a la espera de que se conocieran los resultados de los exámenes, según un comunicado del servicio de sanidad.
La entidad confirmó este viernes que los análisis realizados dieron negativos para la enfermedad.
Tras su retorno de Sierra Leona, en África occidental, el hombre, de unos 40 años, estaba siendo tratado por malaria antes de morir, acorde con informaciones divulgadas por medios locales de prensa.
El cadáver fue descubierto la víspera en horas de la mañana cuando las autoridades fueron alertadas ante la información de que el fallecido había vuelto recientemente de una zona azotada por el virus.
Como medida de precaución, en ese momento se decidió desplegar los procedimientos adecuados de control de infecciones a la espera del resultado de los exámenes de laboratorio.
El ébola ha causado hasta hoy más de mil 350 muertes en África occidental. Aún no existe cura, ni vacuna para prevenirlo, aunque se trabaja en varios fármacos que aún no han sido probados en humanos. Por tanto, no existen garantías de que sean seguros ni efectivos.
Dado la agresividad del brote en Guinea, Sierra Leona, Liberia y Nigeria, la Organización Mundial de la Salud autorizó el uso de algunos medicamentos, aunque muy limitado, debido a la poca disponibilidad.
El ébola tiene una gran tasa de letalidad y provoca fiebre, dolores musculares, de cabeza y garganta, así como vómitos, diarrea, erupciones cutáneas, disfunción renal y hepática y hemorragias.