Entre la gente del básquetbol hubo, durante mucho tiempo, un temor repetido pensando en la etapa post Generación Dorada . ¿Con la vara tan alta, cómo harán los nuevos para imponerse? Esa ansiedad por imaginar el futuro suele instalar ideas inconducentes.
Alguna vez Luis Scola reflexionó al respecto: «Si en el año 2000 alguien decía que en los siguientes Juegos Olímpicos Argentina iba a ser campeón, todos hubieran dicho que estaba loco. Pero ocurrió».
Es difícil tratar de imaginar qué camino tomará la selección en los próximos años o qué jugadores darán un salto de calidad en las siguientes temporadas. ¿Quién hubiera dicho hace tres años que Facundo Campazzo iba a ser base de Real Madrid ?
El presente indica que Julio Lamas encontró, pese a las ausencias de Manu Ginóbili, Carlos Delfino y Juan Gutiérrez una serie de soluciones esperanzadoras. Lo que hasta hace unos días era puro pesimismo, ahora se observa con un optimismo que también puede resultar excesivo.
Facundo Campazzo firmó ayer su contrato como nuevo jugador de Real, el equipo más poderoso de Europa. Si bien la comunicación oficial se hará hoy, su agente, Claudio Villanueva, publicó en su cuenta de Twitter una foto del jugador firmando un contrato.
El día después de conocerse la lista de la selección, y con un plantel que tendrá seis debutantes mundialistas y cuatro jugadores de 23 años o menos, la firma de Campazzo es todo un símbolo de ese recambio que tanto tiempo se esperó.
El cordobés, que tiene 23 años, se ha instalado claramente como el gran líder de la nueva camada. Otra vez, puede ser exagerado, pero si algo distingue a Campazzo es su enorme personalidad. La naturalidad con la que enfrenta situaciones de presión hace pensar que no tiene una noción completa de la importancia de los desafíos que enfrenta.
Juega con determinación y nunca pasa inadvertido. Siempre tiene a mano una jugada sorprendente, de las que levantan a la gente de sus asientos. Puede ser un gran armador, pero también un solvente anotador. Es picante en ataque y en defensa. Suele enloquecer a sus rivales con un juego físico para en la marca que en ocasiones le trae problemas con los jueces.
Y de todas las virtudes que se le pueden enumerar, ninguna destacará más que su valentía. En el juego y en las decisiones como la que acaba de tomar, sumándose a un equipo en el que tendrá que competir con dos bases de jerarquía internacional, integrantes de la selección española, como lo son Sergio Llull y Sergio Chacho Rodríguez.
Nada debería impedir que sea uno de los estandartes de la selección por los próximos diez años. Otra vez puede sonar a ansiedad, pero no es más que la ilusión que despierta semejante jugador.
La lista de Lamas ofrece otros cuatro nombres que prometen tener continuidad con la celeste y blanca: Nicolás Laprovittola, Marcos Delía, Matías Bortolin y Tayavek Gallizzi. Muchas soluciones en el juego interior, un problema frecuente que se alivia con refrescantes apariciones.
Luego hay dos hombres de una generación intermedia, Selem Safar y Marcos Mata, y los otros cinco son la resistencia de la Generación Dorada y tienen entre 34 y 37 años. Será el primer gran torneo en el que ya no son mayoría…
Hay muchas interpretaciones para hacer sobre la elección de Lamas. Descartó a Franco Giorgetti, un alero joven y con gran proyección, y a Nicolás Richotti, que parecía ser una buena opción para darle intensidad al perímetro.
Evidentemente el DT prefirió la especificidad que puede darle Selem Safar en el rol de tirador. Una capacidad probada en el último Premundial de Caracas, y la variedad de soluciones que Laprovittola ofrece para jugar tanto como tercer base pero también como también de tirador, gracias a su muy buen lanzamiento de tres puntos.
Otra conclusión es que reforzó mucho la zona pintada con los jóvenes Delía, Gallizzi y Bortolin, alejando de esa responsabilidad a veteranos que podían desgastarse en el puesto (Nocioni y Herrmann), pero que son naturalmente aleros.
De esta manera, eleva la estatura promedio del equipo en una situación ideal. Y, en caso de que la falta de rodaje afecte a los nuevos en momentos de mucha tensión, siempre está la alternativa de que Chapu vuelva a jugar como ala-pivote, como lo hizo en Londres 2012.
En definitiva, un mix que ofrece un buen balance para acompañar la llegada de la nueva generación..
28,5 años es el promedio de edad de la selección argentina que baja respecto del último gran torneo, Londres 2012, cuando tuvo un promedio de 30,9 años.
6 jugadores se repiten respecto del plantel de 2012: Scola, Mata, Campazzo, Prigioni, Leo Gutiérrez y Nocioni.
El grupo del Mundial: El torneo comenzará el 30 de agosto y la Argentina integrará el Grupo B (en Sevilla), junto con Puerto Rico, Croacia, Filipinas, Senegal y Grecia. En caso de avanzar a octavos, se cruzaría con España, Francia, Serbia o Brasil.
Fuente: Canchallena