De la Sota y el fin del eufemismo: lanzó su campaña presidencial

El gobernador oficializó el jueves en Capital Federal que trabajará “intensamente” para ser el presidente de “la unidad nacional”. Tenía una gira por el sur que suspendió por la tragedia en el gasoducto de Pilar.os imprevistos también juegan en la política. José Manuel de la Sota y su equipo de asesores venían analizando desde hace dos meses la conveniencia de oficializar la precandidatura presidencial. La decisión fue que este era el momento para hacerlo, con una gira por el sur del país.

El destino le jugó una mala pasada a la estrategia de campaña. La explosión del gasoducto en Pilar obligó a De la Sota a regresar ayer por la tarde desde Santa Rosa, La Pampa, donde había comenzado una gira por tres provincias, que terminaría esta noche con una cena en Bariloche.

La oficialización de la candidatura fue por etapas y en cuentagotas. De este modo, De la Sota trata de evitar un impacto negativo en Córdoba, su territorio y el foco de su gestión.

Dos semanas atrás, el gobernador realizó una visita a Santa Fe y Rosario. En reuniones con empresarios y dirigentes peronistas habló como candidato presidencial, pero ante la consulta concreta sobre si era aspirante a suceder a la presidenta Cristina Fernández, De la Sota tiró la pelota afuera con un eufemismo: “Lo estoy analizando”.

Luego de esa gira santafesina, el propio mandatario y su equipo coincidieron en que, si visitaba otras provincias, no debía dejar dudas de que era aspirante presidencial.

Los delasotistas admiten que el gobernador arranca en desventaja con otros candidatos ya instalados, como Massa, Scioli o Macri, y que no podía seguir demorando el lanzamiento.

De allí que la decisión política fue terminar con el eufemismo de estar en campaña sin admitirlo. El jueves por la noche, en una cena en la Casa de Galicia, en Capital Federal, encuentro organizado por el Foro de Pensamiento Peronista que orienta el dirigente Octavio Frigerio, De la Sota no anduvo con grises. “Quiero ser el presidente de la unidad nacional y voy a trabajar intensamente para lograr ese objetivo”, dijo y generó el aplauso entre el selecto auditorio de peronistas porteños.

El gobernador ratificó que participará en las Paso del año próximo por fuera del PJ nacional, hoy hegemonizado por el kirchnerismo. “No voy a participar de las primarias de un partido que perjudica a mi provincia”, justificó De la Sota, apuntado al Gobierno nacional, que dejó a Córdoba fuera de la refinanciación de deudas a las provincias.

Por este concepto, el poder central le descuenta a Córdoba 65 millones de pesos mensuales de su masa de coparticipación. Para ingresar al plan de refinanciación, la Casa Rosada exigía desistir de los juicios en su contra, como, por ejemplo, la deuda por el sistema previsional, que la provincia presentó ante la Corte Suprema de Justicia.

Más allá de algunos roces en las últimas semanas, De la Sota mantiene su plan de competir con Sergio Massa en un mismo espacio por la candidatura presidencial.

En lo personal, el mandatario se sentiría más cómodo compartiendo un espacio con Daniel Scioli, pero el bonaerense parece decidido a jugar su futuro político dentro del universo K.

El gobernador está dispuesto a jugar fuerte por su ambición presidencial, pero el lanzamiento tuvo un imprevisto.

Aunque no es el único que lo hace, por un accidente De la Sota padeció ayer el riesgo político que genera hacer campaña teniendo responsabilidades de gestión.

Ayer por la tarde, cuando se confirmó la existencia de un muerto en Pilar, no dudó: suspendió la actividad proselitista y regresó a Córdoba.

De aquí a diciembre, combinará gestión local y campaña nacional, como lo hacen otros aspirantes presidenciales: 
Macri, Scioli, Sergio Urribarri y el ministro Florencio Randazzo. De todas maneras, el gobernador deberá estar atento al sensible humor social de los cordobeses, quienes lo votaron como gobernador.

Por Julián Cañas

Fuente: www.lavoz.com.ar