Kerry busca una tregua mientras los palestinos muertos suman 820

Los llamamientos internaciones para alcanzar un alto el fuego en la franja de Gaza se han intensificado este viernes, cuando se cumplen 17 días del inicio de la ofensiva israelí. El conflicto suma ya 820 palestinos muertos —192 niños, según Unicef— y 36 víctimas del lado de Israel. El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y el jefe de la diplomacia de EE UU, John Kerry, se han reunido este viernes en El Cairo para intentar impulsar una tregua humanitaria. Ambos, según fuentes estadounidenses y de Naciones Unidas, emprenden en el hotel Fairmont los últimos esfuerzos diplomáticos para lograr un cese de hostilidades entre Israel y Hamás, que controla la franja de Gaza desde 2007.
Mientras tanto, el gabinete de seguridad israelí se ha reunido para estudiar una proposición de alto el fuego trasladada por el secretario de Estado norteamericano, John Kerry. «Se trataría de una tregua humanitaria de siete días que permitiría a las partes discutir en El Cairo», ha explicado a la agencia France Presse una fuente próxima al presidente de la Autoridad Palestina Mahmoud Abbas.

«Si hay tregua humanitaria, habrá negociaciones serias», ha asegurado un diplomático occidental. Aunque, eso sí, este ha evitado cualquier optimismo prematuro: «Los israelíes no quieren que se le imponga ninguna condición».

Por su parte, el movimiento islamista palestino pone como condición para una tregua que se levante el bloqueo que ahoga desde 2006 a la franja de Gaza, donde una gran parte de los 1,8 millones de habitantes dependen de la ayuda humanitaria. Una exigencia repetida en una entrevista a la BBC por el jefe de Hamas Khaled Mechaaln.

La situación es tensa en Cisjordania, donde cinco palestinos han muerto en el marco de un «día de la ira» convocado este viernes por organizaciones palestinas en protesta por la operación militar israelí. Este jueves, además, 16 personas murieron en un ataque a una escuela de la ONU en Gaza. Y el movimiento islámico insiste en que disparó tres contra el aeropuerto Ben Gourion de Tel-Aviv. El tráfico internacional ya se vio perturbado por la suspensión de varios vuelos como consecuencia de la caída de un cohete el martes cerca de la instalación, lo que Hamás celebró como una gran victoria.

Más de 820 palestinos han muerto y 5.273 han resultado heridos, según el último balance de fuentes palestinas. Por su parte, el Ejército israelí ha anunciado la muerte este viernes de otro soldado —sería el trigésimo tercero—, un reservista de 36 años. El Ejército ha anunciado en Twitter que el soldado que estaba desaparecido desde la semana pasada en realidad murió en una operación en la franja. Los cohetes de Hamás, además, han matado en Israel a dos civiles y a un obrero agrícola de origen tailandés.
elpais.com