Tres cacos asaltaron la casa de un oficial de justicia, en 515 y 151. El hombre y su novia escaparon corriendo, luego de saltar un portón, semidesnudos y en medio de la obscuridad. Detalles de una noche de terror.
Un hombre de 34 años y su novia de 33 vivieron en las últimas horas una jornada de terror cuando fueron asaltados y perseguidos por tres delincuentes que los sorprendieron en plena madrugada en su casa de Melchor Romero, informaron fuentes policiales.
Lucas Miguel Profeta dormía junto a su pareja, Celeste, cuando a las 2.30 fueron despertados por fuertes ruidos que provenían del exterior. Tres cacos se habían armado con fierros y comenzaron a golpear una ventana de la casa de las víctimas, ubicada en 515 y 153. Asustados, los jóvenes salieron corriendo por la puerta del fondo y dieron vuelta a la finca, para llegar hasta el portón que se hallaba cerrado con candado.
Sin dudarlo, la mujer saltó por el portón de reja y detrás lo hizo su novio, pero entonces los malhechores los descubrieron y fueron tras ellos. A él llegaron a sujetarlo del tobillo, pero logró zafarse y tirarse hacia el otro lado. A grito de auxilio, corrieron por la calle, pero fueron alcanzados por los cacos. A punta de pistola y bajo amenazas, le robaron a Lucas el celular y la billetera.
“Estaba tratando de llamar al 911”, le contó el hombre a Trama Urbana. Y agregó que, una vez despojados de sus pertenencias, los delincuentes regresaron a la casa y ellos le pidieron ayuda al vecino.
Tiros y un detenido
Mientras las víctimas se comunicaban con la policía, los malvivientes volvieron a la casa , donde robaron diferentes objetos de valor y hasta una cachorra de Pitbull.
“Lo único que quería era que apareciera el perro. Lo demás se recupera”, dijo Lucas, oficial de justicia de la Corte.
Para huir, los ladrones se subieron al Peugeot 207 del hombre, lo pusieron en marcha y rompieron el portón con el mismo vehículo, dejando la puerta en la zanja de enfrente.
Durante la tarde de ayer, uno de los malvivientes cayó al intentar robar por la zona y esconderse en un asentamiento luego de efectuar varios disparos. Tras ser casi linchado por los propios vecinos, llegó la Policía del Comando de Prevención Comunitaria y lo redujo, encontrándole entre las ropas las llaves del Peugeot, además de un arma. Dijo que el coche se encontraba en 510 y 161 y así era. En el interior apareció documentación y la cachorra, en buen estado.
Lucas Profeta destacó la labor policial, pero se quejó de la falta de mantenimiento del barrio. “Hace un año y medio pedimos un mejorado de la calle, porque no pueden entrar los patrulleros. El otro día se descompensó una vecina y la ambulancia no pudo arribar”, dijo. También pidió que corten los pastizales y admitió que “el expediente con los pedidos de mejora estaba archivado en la Municipalidad”. Por último, admitió que un comisario le dijo que, de tener una calle propicia, la zona sería más segura ya que “pasaría un patrullero cada cuarenta minutos”.
Efectivos de la comisaría 14 se encuentran en búsqueda de los otros responsables del robo.
Cayó el fantasma tras un grave ilícito en Otero
Tiene 20 años, lo apodan El fantasma y fue detenido en las últimas horas, acusado de ser uno de los dos delincuentes que el pasado mes de marzo asaltó el local Otero de Camino Centenario y 512.
Efectivos de la DDI lograron su identificación tras analizar los videos de la firma y fueron tras sus pasos. Pero el caco, sabiéndose perseguido, desapareció y recién pudo ser ubicado ayer. Se llegó hasta él tras una información que manejaron los investigadores, en donde se establecía que el joven se había radicado en la zona de El Pato y que solía concurrir a unas canchas de fútbol ubicadas en la intersección de las rutas 2 y 36.
Tras un operativo encubierto en las inmediaciones y tras horas de vigilancia, los agentes divisaron al sospechoso y lo interceptaron, pero éste brindó datos de un pariente suyo. Ante eso, los policías le mostraron las imágenes de Otero en donde se lo veía claramente, y al caco no le quedó otra alternativa más que admitir su verdadera identidad, por lo que fue detenido.
Al imputado, domiciliado en 117 entre 520 y 521, se le inició una causa por “robo calificado”.
El ilícito se produjo el 22 de marzo, cuando El fantasma, junto a un cómplice apodado El boli ingresaron armados a Otero y, tras reducir a empleados y clientes, huyeron con celulares y dinero.
Escruche a casa de celulares
Un grupo de delincuentes escruchó durante la madrugada de ayer un comercio de celulares ubicado en 229 y 47, informaron fuentes policiales.
El dueño del local, Oscar Antonio Marchetti, descubrió el ilícito a las 7 de ayer, cuando se prestaba para abrir. De inmediato llamó al 911 y contó que los cacos habían violentado la puerta de la persiana y la puerta de vidrio con aluminio. Luego de eso, ingresaron al interior y se llevaron 30 celulares de diferentes marcas.
Personal de la comisaría 15 se encuentran investigando el hecho para tratar de dar con los responsables.
Fuente: Diario Hoy