Es un funcionario de confianza del mandatario bonaerense y amigo del conductor. La Justicia analiza su situación.
En medio de su aparición en el programa de Marcelo Tinelli, la Justicia debe decidir el destino judicial del asesor bonaerense Lautaro Mauro en una causa derivada del caso Ciccone. El funcionario fue enviado de Daniel Scioli en el programa del martes cuando se presentó la personificación del gobernador en el “Gran bailando”.
Mauro debió declarar como testigo en la causa Ciccone, en la que se investiga al vicepresidente Amado Boudou. Mauro es amigo de la familia Scioli desde hace dos décadas. Incluso fue novio de la hija del gobernador. Se desempeña en la Secretaría General de la Provincia y es conocido por sus aceitados contactos con el mundo político, empresarial y del espectáculo.
En 2010, Boldt y The Old Fund se disputaban el negocio de la imprenta de billetes. Mauro pactó una reunión entre el socio y mejor amigo de Boudou, José María Núñez Carmona, y el director de Boldt, Guillermo Gabella.
Gabella declaró que la reunión fue pactada a pedido de Núñez Carmona y complicó así al vice. El socio del vice lo negó. Cuando Mauro declaró como testigo en la causa, le dijo la razón a Núñez Carmona. Núñez Carmona denunció a Gabella de supuesto falso testimonio y se abrió una nueva causa a manos del juez Rodolfo Canicoba Corral. Mauro dijo a PERFIL que esa causa se inició hace dos años y medio y que no ha sido notificado de ningún movimiento en el expediente desde entonces. Se mantuvo firme en su versión de los hechos y dijo que fue “un testigo más” en la causa Ciccone. “Cada vez que aparezco en un medio, publican sobre esta causa, pero no hay ninguna novedad”, agregó.
Mauro todavía no fue notificado, pero de los cruces telefónicos que ordenó Canicoba Corral surge que fue Mauro quien llamó a Gabella durante los días en que se pactó la reunión. Ahora, el juez le pidió al fiscal Miguel Osorio que impute a Mauro por supuesto falso testimonio, confirmaron fuentes judiciales a PERFIL.
Fuente: Perfil