Un hombre fue asesinado por ladrones en su casa de Wilde: un detenido

Fue el lunes en esa localidad bonaerense. Los delincuentes se encontraban dentro y habían reducido a las personas que estaban dentro de la vivienda, donde la víctima vivía. Le dispararon en varias oportunidades y huyeron. Granados intervino la comisaría mientras se investiga a los efectivos, quienes no habrían cumplido con el protocolo previo al homicidio. Hay un sospechoso detenido.

Un hombre de 44 años fue asesinado de al menos tres balazos en la puerta de su casa de la localidad bonaerense de Wilde, adonde llegó cuando en el interior había delincuentes robando que mantenían maniatados a otros habitantes, informaron fuentes judiciales y policiales.

Los delincuentes habían ingresado a la casa una hora y media antes, luego de tomar como rehén a uno de sus habitantes que había salido a realizar compras para la cena, añadieron los voceros.

En tanto, se investiga la actuación policial en el caso, ya que vecinos denunciaron que, a raíz de dos llamados al número de emergencias 911, la Policía había arribado a la zona antes del crimen, pero no actuó y ni siquiera anotó el número de patente del auto señalado como sospechoso.

El ministro de Seguridad bonaerense, Alejandro Granados, ordenó ayer a la tarde la intervención de la comisaría 5ta. de Avellaneda, con asiento en Wilde, mientras se investiga a sus efectivos.

Por el caso, anoche fue detenido en la localidad bonaerense de Dock Sud un sospechoso, cuya huella dactilar fue hallada en la escena del asalto y crimen, por lo que fue identificado mediante la base de datos informática de personas con antecedentes (AFIS).

El episodio se inició la noche del lunes cuando un hombre que estaba de visita en la casa de su madre, situada en Bolívar 5559, entre Lobos Y Bismark, salió a comprar una gaseosa para la comida que compartiría con su madre, su novia y un hermano.

Cuando realizó unas cuadras a bordo de su auto Ford Fiesta, el hombre fue interceptado por tres delincuentes que se cruzaron en su camino en un Volkswagen Bora, dos de los cuales, bajo amenazas con armas, se subieron a su rodado.

Las fuentes informaron que los asaltantes hicieron recorrer a la víctima varias calles, hasta que decidieron llevarla a la casa de su madre.

Una vez allí, los delincuentes amenazaron y ataron a todos los habitantes de la casa y comenzaron a recorrer las dependencias en busca de elementos de valor, mientras exigían con suma violencia que les dieran dinero, explicaron los voceros.

Según contó a la prensa esta mañana Marcelo, uno de los hermanos del hombre tomado de rehén que no se hallaba al momento del hecho, los delincuentes golpearon a su madre y mientras iban encontrando fotos de viajes que habían hecho les decían «ustedes tienen guita» y les exigían la entrega de dinero.

Mientras se concretaba el robo, llegó a la vivienda Javier Gallardo, pareja de uno de los hijos de la dueña de casa, quien vivía allí y sorprendió en la puerta a los delincuentes cuando se disponían a huir.

«No sabemos si hubo un forcejeo o se asustaron cuando entraba, pero en ese momento le efectuaron varios tiros que le provocaron la muerte», explicó a Télam la superintendenta de Policías Seguridad de la Policía bonaerense, Carmen Graciela Cuñal.

Según fuentes judiciales, Gallardo presentaba al menos tres impactos de bala, uno de ellos en el cráneo y otro en el pecho, aunque se aguardaban los resultados de la autopsia para descartar que haya recibido más.

El hombre fue trasladado por vecinos al hospital de Wilde, situado a pocas cuadras, aunque arribó muerto.

Si bien no hubo testigos directos, vecinos aseguraron que se escucharon «varios disparos» y que al parecer los delincuentes antes de huir remataron a la víctima en el suelo, lo que será corroborado en la autopsia.

Los voceros judiciales explicaron que en la escena del crimen se secuestraron seis vainas servidas de dos armas calibre 9 milímetros.

Tras el asalto y ataque, la banda escapó en el Volkswagen Bora y en el Fiesta de la víctima asaltada, este último hallado horas después en la Capital Federal.

Efectivos de la seccional estuvieron en el lugar, aunque no llegaron a interceptar a los delincuentes ni a tomar los datos de la patente del Bora.

Esa actuación policial es sometida a investigación, ya que los vecinos aseguraron que llamaron al 911 cuando vieron el vehículo que consideraron sospechoso, no obstante lo cual los policías estacionaron adelante de éste y «no hicieron nada».

«Había un auto que estaba en la esquina hacía como una hora parado y fue cuando llamaron a la Policía para que venga a verificar, ya que llamaba la atención; era robado o estaba por algo. La Policía se acercó pero no hizo nada, de hecho vino un patrullero y se paró adelante del auto», dijo un vecino a la prensa.

La comisario Cunial confirmó a Télam que Asuntos Internos del ministerio de Seguridad bonaerense interviene para establecer si los efectivos cumplieron o no con el protocolo establecido para estos casos y admitió que los pesquisas no cuentan con los datos del auto de los delincuentes, por lo que se deben analizar las imágenes de las cámaras de seguridad instaladas en la zona.

«Tenemos todos los elementos tecnológicos para chequear el horario de llegada. Y habrá que verificar si los policías actuaron como indica el protocolo para estos casos o no», explicó Cunial.

El hecho es investigado por la Unidad Funcional 2 descentralizada de Avellaneda, a cargo del fiscal Mario Prieto.

Fuente: Online-911