BASE AEREA BELBEK, Crimea (Reuters) – Soldados rusos utilizaron vehículos blindados, armas automáticas y granadas de aturdimiento para capturar una base aérea ucraniana en Crimea, un día después de que el presidente Vladimir Putin firmó las leyes que completan la anexión a Rusia de la península en el Mar Negro.
Las fuerzas ucranianas también abandonaron una base naval después de ataques de manifestantes afines a Moscú y debieron entregar dos buques insignia a las fuerzas rusas.
Las instalaciones en Belbek y Novofedorovka estaban entre las últimas bajo control ucraniano después de que fuerzas armadas de Moscú tomaron el control y posteriormente anexaron a Crimea, cuya población es mayoritariamente de etnia rusa y que tiene una de las mayores bases navales de Rusia en Sebastopol.
La captura de la península por parte de Rusia después de la destitución del presidente ucraniano afín a Moscú en medio de enormes protestas ha provocado la peor crisis entre Este y Oeste desde la Guerra Fría.
Estados Unidos y la Unión Europea han aplicado sanciones personales contra algunos de los aliados políticos y de negocios más cercanos del presidente ruso, Vladimir Putin.
En la base aérea de Belbek, un reportero de Reuters dijo que vehículos blindados atravesaron los muros del recinto y que escuchó disparos y granadas, lo que convierte a su captura en una de las más dramáticas de la ocupación de Crimea por parte del Rusia, que ha sido prácticamente sin derramamiento de sangre.
Las fuerzas rusas ya habían capturado la pista de aterrizaje de Belbel y los aviones de guerra al inicio de la crisis. El recinto capturado el sábado contenía las barracas, depósitos de armas y un edificio de comando.
El Coronel Yuliy Mamchur, comandante de la base, dijo que un soldado ucraniano había resultado herido y que él sería llevado por los rusos para sostener negociaciones en una ubicación no revelada. Dijo que los ucranianos pondrían sus armas en el almacén de la base.