Tres delincuentes fueron detenidos ayer en Avellaneda luego de llevarse cautivo a un cobrador de una empresa de productos lácteos y enfrentarse a tiros con policías a lo largo de varias cuadras.
Según informaron fuentes policiales y judiciales, uno de los aprehendidos gozaba de prisión domiciliaria y está imputado por haber integrado la banda que asaltó una concesionaria de autos en 2009 y por haber aportado los vehículos a quienes cometieron en 2010 el asalto a un camión blindado en Escobar, donde fueron asesinados dos policías.
El jefe de la Policía Departamental Lanús, comisario Fabián Perroni, relató a Télam que el hecho se inició a las 12.30 en el centro de Avellaneda, cuando el cobrador de la empresa La Serenísima, que iba efectuando a pie su trabajo y llevaba una bolsa con dinero, fue abordado por tres delincuentes y privado de la libertad.
Los ladrones, uno de los cuales tenía un chaleco similar al que usa la policía bonaerense, aunque vestido de civil, subieron al hombre a un vehículo Fiat Punto, que luego se determinó que había sido robado días antes en Lanús.
«Esa situación es advertida por un móvil de la comisaría de Avellaneda que estaba en el lugar, da rápidamente aviso a otros móviles para que vengan en apoyo y se inicia una persecución», relató Perroni.
Los asaltantes empezaron a ser perseguidos por tres patrulleros, por lo que comenzaron a disparar contra los móviles. En el trayecto liberaron al cobrador, quien resultó ileso.
Perroni dijo que los delincuentes opusieron mucha resistencia para ser detenidos, porque cuando los móviles querían interceptar el vehículo en el que se movilizaban los embestían para poder continuar con la huida.
Tras las detenciones se secuestraron una pistola calibre 9 mm y un revólver, en tanto que se determinó que todos los delincuentes tienen antecedentes penales por delitos similares, son oriundos de Avellaneda y La Matanza, y uno de ellos estaba cumpliendo prisión domiciliaria.
«Según los antecedentes que estamos chequeando, uno de ellos habría participado del intento de robo al blindado de la Panamericana donde murieron dos policías», aseguró el jefe policial.
Perroni destacó el hecho de que el rehén, los policías y los vecinos no resultaron heridos, ya que a esa hora del mediodía había gran cantidad de gente caminando en la zona céntrica de Avellaneda. En cambio, quedaron expuestos los balazos en tres de los patrulleros que persiguieron a los ladrones y en el Fiat..
Fuente: La Nación