Es lo que aseguraron familiares de la víctima, sin aclarar el motivo de la advertencia de muerte. Analizan imágenes de las cámaras de control viales.
Los policías que investigan el homicidio del empresario de nacionalidad coreana encontrado asesinado ayer con un corte en el cuello dentro de su auto en el barrio porteño de Caballito, había sido amenazado de muerte.
Eso le contaron familiares de la víctima a los investigadores, asegurando que estaba nervioso últimamente, aunque no aclararon el motivo de la amenaza, informó Télam.
La víctima fue identificada por la policía como Seong Il Yoon, un empresario dedicado a la importación, de nacionalidad coreana y de 60 años, y su cadáver fue hallado cerca de las 14 de tarde de ayer dentro de su Honda Accord negro en el cruce de Malvinas Argentinas y la avenida Directorio, en Caballito.
Según los investigadores, el empresario tenía domicilio en la localidad bonaerense de Caseros, pero habitualmente concurría al barrio de Caballito para asistir a la Iglesia Presbiterana Coreana ubicada en esa zona.
Un vecino fue quien observó el auto con un hombre adentro y alertó a la comisaría 12a., con jurisdicción en la zona, por lo que un patrullero concurrió al lugar.
De inmediato se convocó a personal del SAME y los médicos determinaron que el hombre ya estaba fallecido y que presentaba un profundo corte en el cuerpo del lado izquierdo.
El auto se hallaba estacionado sobre la mano izquierda de la calle Malvinas Argentinas, unos metros después de haber cruzado la avenida Directorio, y la sospecha es que el hombre regresaba tras concurrir a un encuentro religioso en la Iglesia Presbiterana Coreana.
Los policías encontraron dentro del auto dos teléfonos celulares y una billetera con dinero. De todas formas, no descartan ninguna hipótesis, incluso la del intento de robo o la de un ajuste de cuentas, dijeron los voceros consultados por Télam.
Un vecino dijo a la prensa que la víctima iba todos los domingos a ese centro espiritual ubicado a una cuadra del lugar del hallazgo del cuerpo.
«Era un hombre muy respetado en la iglesia y por la comunidad, era amigable con la gente del barrio» destacó el hombre, quien calificó al hecho como «inexplicable».
Al lugar concurrió la Unidad Criminalística Móvil y los expertos en rastros trabajaban en busca de huellas del posible homicida.
Además, fueron convocados detectives de la División Homicidios de la Policía Federal, quienes trabajan bajo las órdenes de la fiscal de instrucción porteña número 43, Felisa Elena Krasucki.
Los investigadores analizaban las imágenes de las cámaras de control de tránsito de esa zona, para intentar encontrar en ellas el momento en que se detuvo el vehículo del empresario.
Además rastreaban si algún edificio o comercio de la cuadra cuenta con cámaras de seguridad que pudieran haber captado el momento del hecho o de la fuga del o los homicidas.
Por otra parte, la fiscal ordenó el secuestro de los dos teléfonos celulares de la víctima para determinar las últimas comunicaciones realizadas y recibidas por el empresario, como así también los mensajes de texto.
911-online.com.ar