En el país nacen 5 mil bebés al año con cardiopatías congénitas

ninosDe cada 100 casos, 70 necesitan operación. Mañana es el día de lucha contra la afección.

En la Argentina, nacen cada año más de 5.000 niños con cardiopatías congénitas, que consisten en problemas en la estructura o en el funcionamiento del corazón por un desarrollo anormal antes de nacer. Setenta de cada 100 casos necesitan una operación. Mañana se conmemora el día mundial dedicado a esas cardiopatías para tomar conciencia y para que los niños lleguen más temprano al diagnóstico y al tratamiento.

“Si son diagnosticadas precozmente, las cardiopatías congénitas se pueden tratar y el porcentaje de éxito es superior al 90 %”, explicó Rubén García, jefe de cirugía cardiovascular pediátrica de la Fundación Favaloro. “Es necesario que las embarazadas sepan que el seguimiento médico es clave”, afirmó Julio Trentadue, jefe de internación y cuidados intensivos pediátricos de la Fundación, donde ayer se dio a conocer una campaña con la empresa Chicco, por la cual se venderá una pulsera naranja en las farmacias para juntar fondos para la Fundación Aiutare i Bambiri, que apoya a niños de bajos recursos en todo el mundo.

En el país, el 46% de los chicos con cardiopatías congénitas no tienen cobertura social, y es por eso que en 2010 el Ministerio de Salud de la Nación creó el programa Sumar por el cual se financian todas las cirugías, los estudios diagnosticos y los traslados de menores de 6 años con malformaciones congénitas del corazón. Ya se operaron en hospitales públicos a 5.851 chicos y adolescentes (el año pasado, la cobertura se amplió hasta los adolescentes de 19 años).

Aunque están presentes al momento de nacer, las cardiopatías congénitas pueden no ser visibles inmediatamente ni causar problemas durante años. Hay medidas de prevención que se pueden tener en cuenta durante el embarazo, de acuerdo con el Ministerio: evitar el consumo de alcohol y drogas, no ingerir ningún medicamento que no esté indicado por el médico, realizarse un examen de sangre para detectar la inmunidad contra la rubéola, controlar el nivel de azúcar en sangre, especialmente en las embarazadas con diabetes, y realizarse las ecografías periódicas para detectar cualquier problema y que el equipo médico esté preparado y sea el adecuado. Este último consejo es crucial, como lo ilustra el caso de Ramiro Erbes.

“No había certeza de que Ramiro fuera a seguir viviendo, pero la operación se hizo hace tres años y hoy el nene juega, corre, no se agita y es fanático de las motos”, cuenta Cecilia Almeira, la mamá del chico, que superó a través de una cirugía una cardiopatía congénita. Ella también quiere despertar conciencia en las embarazadas. “La verdad es que me hubiese gustado que se detectara mucho tiempo antes el problema para no pasar tanta angustia”, recordó.

Fuente: Clarín