La octava, maravilla

Mohamed no duda: “La Copa es el objetivo”, blanqueó el DT el plan Libertadores en 2011. Claro que también dijo que pretende sumar “25 puntos” en el Clausura.

No descansa. El clima y las playas de Miami lo pueden tentar, broncear y darle algo de relax a su cuerpo. Sin embargo la máquina cerebral de Antonio Mohamed no se toma vacaciones, ni siquiera mirando un partido de la NBA, de donde rescata cuestiones tácticas. “La intensidad y los conceptos que tienen en la marca en zona después se aplican en la pelota parada”, señala. Sí, en todo encuentra el técnico herramientas para mejorar su trabajo. Y vaya que no será un 2011 tranquilo para Tony ni para Independiente, aunque feliz… La adquisición de la 16ª copa ante Goiás le dio la chance de disputar una nueva edición de la Sudamericana, la Recopa ante el Inter de Porto Alegre, la Suruga Bank contra el Jubilo Iwata japónés (en Japón) y, claro, el mano a mano ante Deportivo Quito en el repechaje de la Libertadores, el torneo más preciado para el Rojo y la meta del club y del Turco. “La Copa es el objetivo”, remarca como para que no queden dudas de que a las siete que ya hay en las vitrinas de Mitre 470, le quieren agregar la octava maravilla…

Encima, la Libertadores era el torneo al que pretendía acceder Racing y el que Independiente le arrebató al ganar la Sudamericana. Y cuando a Mohamed se le pone algo entre ceja y ceja… Por caso, el Turco dio la pauta cuando, en diálogo con radio Del Plata (AM 1030), respondió sobre la verdadera cara de su Independiente: ¿es el que se consagró en la Sudamericana o el que fue último en el Apertura? “Independiente es uno solo. Es el campeón. Apostamos todo a la Copa y lo logramos. En el campeonato jugamos dos partidos con el equipo completo, con Racing (1-0) y Boca (0-0). Creo que es clara la respuesta”, dijo.

Aunque Mohamed es consciente de que no puede dar ventaja. Sabe que la Copa no tapa la magra campaña de 14 puntos del torneo (con la fecha de Tigre postergada y la chance de llegar a 17), cuando la idea del técnico era hacer 20. Por eso, no quiere tropezar dos veces. La Libertadores es la prioridad, pero es mucho más exigente que la Sudamericana. Claro que la presión será doble porque, para no sufrir con el promedio, no podrá desatender el campeonato local: “La Copa es el objetivo. Después, hacer 25 puntos en el Clausura. En junio se pierde una temporada floja (de 39) y así quedaríamos entre los cinco primeros”.

Fuente: Olé