El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, superó la moción de censura presentada en la Cámara de Diputados por la oposición de centroizquierda y los ex socios del gobierno liderados por Gianfranco Fini con 314 votos a favor del mandatario y 311 en su contra. La estrecha victoria de Berlusconi se vio acompañada por fuertes enfrentamientos en el centro histórico de Roma, que dejaron más de 100 personas heridas.
Según reportaron medios italianos, unos 60 manifestantes y unos 57 policías resultaron heridos.
Un grupo de manifestantes y ultraizquierdistas se enfrentó con la policía en el centro histórico de Roma. Entre otros, incendiaron varios vehículos y destruyeron vidrieras y mobiliario de numerosos bares en la céntrica Vía del Corso y en la Piazza del Popolo.
Anoche Berlusconi renovó su oferta al partido de centro, UDC, dirigido por Pier Ferdinando Casini, para que se convierta en su aliado. La inclusión de la UDC en su gobierno es imaginable, declaró el jefe de gobierno y magnate de los medios.
El presidente italiano, Giorgio Napolitano, dejó en claro que nuevas elecciones no son deseables para Italia, dijo Berlusconi. El premier de 74 años le presentó al jefe de Estado en el Palacio Quirinale su informe sobre los resultados de las votaciones y sus planes para el futuro inmediato. El resultado se aseguró después de una intensa campaña de acuerdos a puertas cerradas, en los que las acusaciones de la oposición de compra de votos y corrupción han sido respondidas con feroces negativas y acusaciones de traición.
El primer ministro había convocado a las fuerzas políticas «moderadas» a cooperar para ampliar las bases de sustentación del gobierno, y en particular apuntó a Umberto Bossi, el socio de Berlusconi de la populista Liga Norte, quien aclaró que su partido no se opone a la inclusión de esa agrupación en la coalición.
El estrecho resultado favorable en la Cámara de Diputados fue saludado por los legisladores oficialistas con alivio y aplausos sostenidos. Muchos de ellos agitaban banderas italianas. Algunos clamaban con cánticos la renuncia de Fini a la presidencia de la Cámara. El portavoz del líder del grupo, Fabrizio Alfano, anticipó sin embargo que su jefe no presentará la dimisión. Algunos parlamentarios de bandos enfrentados se fueron a las manos. Berlusconi ya no cuenta con mayoría parlamentaria a partir de la ruptura de la coalición con Fini a fines de julio. Pero, ya pasó exitosamente un voto de confianza en septiembre. De momento sigue siendo una incógnita cómo se desarrollarán los acontecimientos a futuro. Con una mayoría tan estrecha no se puede gobernar, opinaron líderes opositores. Incluso Bossi había dicho que preferiría elecciones anticipadas. Mientras se votaba en el Parlamento, en los alrededores se registraron fuertes disturbios encabezados por opositores al Gobierno.
Fuente: DPA-Télam