Tocó, entregó, distribuyó, marcó y casi hace un gol. Y no sólo eso: hasta avisó que Boca será mejor con Román.
Había terminado hacía una hora el baile de Boca sobre Racing cuando Fernando Gago se frenó ante media docena de personas que lo rodeaban, levantó la cabeza en el contexto de ese asedio, pensó como lo hace siempre y metió su última asistencia del día: “Román tiene una calidad increíble y la demuestra partido a partido. Cuando esté al cien por ciento lo vamos a necesitar y mucho”. Eligió declarar eso el mejor jugador de la cancha en el clásico de ayer, como si hubiese sentido la necesidad de dejar un manifiesto para todo aquel que piense que no pueden jugar juntos con Riquelme. Y no es casual que le haya nacido decir eso: quedó a la vista que Gago siente esto de jugar al fútbol del mismo modo que Román.
Fue pura clase lo del hombre de la Selección Argentina, que después de lograr la clasificación al Mundial de Brasil con Messi y compañía el martes en Asunción (donde tuvo otro gran partido) se calzó la camiseta azul y oro y desplegó todo su talento. Se transformó en Fernando I de La Boca.
“Dominamos el partido desde el inicio. Intentamos generar un buen flujo de juego y situaciones de gol, manejamos los ritmos. Eso es importante porque el equipo logra confianza en lo que hacemos y eso se transforma en buen juego. Ahora necesitamos mantenerlo y ratificarlo”, desmenuzó el hombre que paseó su juego por Real Madrid, Valencia, Roma y Vélez.
Ayer, sólo le faltó el gol (tuvo un mano a mano en el segundo tiempo en el que intentó sin éxito colocar la pelota por sobre Saja) para completar todos los casilleros de un partido perfecto. Igual le sobró para lucirse. Toque, entrega, distribución y marca. Fue el estratega absoluto, el fabricante de fútbol de Boca. Lo hizo todo Pintita, que se había perdido el juego ante Olimpo de hace una semana pero que ya había mostrado su talento frente a Vélez, hace quince días, en su vuelta a La Bombonera.
“Hice un buen partido pero el equipo también fue muy compacto. Estuvimos muy bien, sobre todo en las segundas jugadas porque generamos chances de gol antes de que Racing pudiese defender. Debimos concretar más si pensamos en la cantidad de situaciones que dispusimos”, manifestó. Y agregó que “es muy importante terminar el arco en cero por primera vez. Ahora tenemos que pensar en ganar todos los partidos, sin importar el rival que nos tengamos en frente: tenemos que vencer al que sea para seguir peleando por el título”.
Ovacionado desde que su cara apareció en la pantalla gigante cuando se anunció la formación, Fernando también recibió el “ Olé, olé, olé, Gago, Gago” de toda La Bombonera durante el transcurso del segundo tiempo. Lo aplaudieron de pie desde la platea después de un taco en la mitad de la cancha en una pared con Sánchez Miño. Y con todo su fútbol durante los 90 minutos, levantó a la gente que invirtió su tiempo y arriesgó su estado de salud bajo la lluvia y el frío de la tarde del domingo en La Boca.
“Fernando está demostrando todo su nivel. Es un mediocampista titular en la Selección y, como tal, tiene una jerarquía y una técnica envidiable. Nosotros lo aprovechamos”, lo elogió Carlos Bianchi en la conferencia de prensa, cuando se le pidió un análisis del juego del hombre que llegó en este semestre y le aportó calidad al plantel. Igual fue cauto el Virrey: “Esperaré a verlo jugar junto a Román para ver cómo funciona el equipo”.
Ladero de Messi en la Selección, dueño de la mitad de la cancha con estilo, Gago será el socio adherente ideal para Riquelme. Ese al que eligió como el destinatario de su última asistencia del domingo.
Fuente: Clarín