Londres, 26 ago (PL) El ministro británico de Relaciones Exteriores, William Hague, admitió hoy la posibilidad de lanzar una acción contra Siria, sin autorización de la ONU.
Es posible responder al uso de armas químicas en Siria sin pleno aval del Consejo de Seguridad (CS) de la ONU, declaró Hague a la cadena de radio y televisión BBC, al referirse a versiones aupadas en Occidente sobre el empleo de esas armas por el gobierno sirio.
Un reciente informe preparado por expertos rusos y presentado al CS indicaba que son los grupos armados opositores los que utilizan armas químicas en Siria, tal y como lo asegura el gobierno del presidente Bashar al Assad.
En marzo de 2003, después que el entonces primer ministro británico, Anthony Blair, mintió ante los parlamentarios de su país al hablar de armas de destrucción masiva en Iraq, el Reino Unido participó junto a Estados Unidos en una agresión contra Bagdad.
Las declaraciones de Hague y de otros funcionarios occidentales sobre la presunta utilización de armas químicas por parte del gobierno de Damasco aumentaron después de los éxitos registrados por el ejército sirio, comentaron expertos al canal Russia Today (RT).
Hague apela ahora a argumentos «humanitarios» para justificar un ataque contra el estado levantino, luego de los sucesos del pasado 21 de agosto en las afueras de la capital siria, donde unos 300 civiles murieron, como consecuencia del empleo de las citadas armas.
Medios de prensa locales recuerdan que tras la invasión anglo-estadounidense contra Iraq, nunca aparecieron las armas de destrucción masiva, la principal justificación para esa acción.
Estados Unidos concentró frente a las costas sirias a la VI Flota, cuyos navíos portan unos 112 misiles cruceros, mientras la V Flota, en el Golfo Pérsico, cuenta con los portaaviones Nimitz y Hary S. Truman, con 102 aviones y 182 misiles cruceros, destaca RT.
De acuerdo con el rotativo Daily Telegraph, mientras la jefatura de la Armada Real británica discute la lista de posibles objetivos, varias embarcaciones se posicionan en zonas cerca de Siria para eventuales ataques.
El primer ministro británico, David Cameron, suspendió ayer unas cortas vacaciones para presidir el miércoles una reunión del Consejo de Seguridad de su país.