Monseñor Bernacky les recomendó que para protestar contra el gobernador “vayan a la Casa de Gobierno”.
Un cartel amarillo de enormes dimensiones. El mensaje: “Urtubey: desmontar es pecado”. ¿Dónde? Frente a la Catedral, en plena vereda del santuario de nuestros santos patronos. Esta escena se pudo ver ayer a la mañana y se completó con la intervención de la policía, que retiró a los activistas de Greenpeace, quienes de esa manera protestaban contra el desmonte en Salta. A los ocho ambientalistas que participaban de la protesta se los demoró en la seccional Primera y se les labró una contravención, aunque no fueron detenidos, como se informó en varios medios de prensa locales.
Desde la Catedral Basílica de Salta, monseñor Dante Bernacky se mostró muy enojado y, en diálogo con El Tribuno, expresó: “No seamos tan ingenuos. Greenpeace es una organización internacional que tiene intereses económicos y políticos, que no son nada ingenuos”. Y agregó luego: “No critico el derecho a manifestarse de esta organización, pero sí me pareció absolutamente inadecuado que esta protesta se haga en el ámbito del santuario del Señor y la Virgen del Milagro, en vísperas de la entronización de las imágenes y en el marco de una campaña política, en tanto que en el cartel se apuntaba directamente al gobernador de la Provincia”.
Los activistas llegaron en vehículo a la Catedral y en pocos minutos erigieron la estructura que soportaba el cartel. Algunos de ellos se subieron a esa estructura de más de siete metros, mientras que otros repartían volantes a los transeúntes. Inmediatamente comenzó el revuelo y no pasó demasiado tiempo hasta que los efectivos policiales llegaron al lugar para comunicarles a los ambientalistas que su accionar era inapropiado y debían retirarse. “No es un delito lo que hicieron, no se los detuvo. Sí debieron prestar declaración indagatoria y se les secuestraron los elementos con los que se manifestaban”, dijo el comisario Bernardino Colque, jefe de la seccional Primera de la policía.
“¿Por qué en la Catedral?”, preguntaron desde varios medios a los activistas de Greenpeace. El argumento: “Porque consideramos que desmontar es pecado”, respondieron.
“Ese es un argumento muy traído de los pelos. Son gente de afuera que terminan pasando por encima de los salteños”, retrucó Bernacky.
Dante Bernacky fue categórico: “No nos entienden (los activistas) a nosotros como salteños, no entienden que el lugar que ellos han ocupado frente a las imágenes de nuestros santos patronos es un lugar sagrado y que marca la esencia de la historia de la fe salteña. No hay derecho de hacer propaganda netamente política utilizando el atrio de la Catedral Basílica”, declaró. “Si la manifestación es contra el gobernador, que vayan a la Casa de Gobierno o al lugar en el que vive el gobernador, no a este santuario”, agregó. El vicario reiteró que no está en contra de las manifestaciones y opinó respecto a los desmontes: “Hay ausencia del Estado en el control de los desmontes”.
Hernán Giardini, de Greenpeace, en diálogo con El Tribuno, aseguró que seguirán las manifestaciones hasta tanto el gobernador Juan Manuel Urtubey no ponga en práctica políticas acordes con la ley de bosques. “Nadie se manifestaba en contra de lo que hacíamos, incluso algunas personas nos aplaudían y felicitaban por este reclamo. Al único que le molestó es al monseñor, quien debería revisar si está de acuerdo con que se desmonte o no”, expresó
Fuente: El Tribuno