Crimen en La Favela: derivan a menor de un instituto a un centro de rehabilitación

La FavelaSindican a la adolescente de trece años por matar de un tiro a un vecino. En una audiencia se dispuso trasladarla a una comunidad terapéutica para que reciba asistencia sanitaria

En la audiencia oral realizada ayer en el fuero de responsabilidad penal juvenil, la jueza de garantías de La Plata Inés Siro, a instancias de la defensa, dispuso que la adolescente de 13 años demorada la semana pasada por su presunta participación en la muerte de un hombre que apareció con un disparo en la cabeza en un departamento de La Favela, en Tolosa, sea derivada a una comunidad terapéutica para que reciba asistencia sanitaria.

De este modo, la medida de encierro dispuesta la semana pasada por la magistrada Siro, al resolver el alojamiento de la menor en un instituto de chicos no punibles, adquirió un nuevo giro, al analizar la situación de la adolescente.

A través de los elementos aportados ayer a la audiencia por el defensor oficial Ricardo Berenguer y la fiscal del fuero minoril Ana Rubio, la jueza dictaminó el traslado a una granja de rehabilitación.

Fuentes judiciales especificaron que la audiencia no trató el fondo de la cuestión. Esto es, el móvil del hecho y las circunstancias que lo desencadenaron. En rigor, aún no se dirimió la calificación: si fue un homicidio o un accidente, cuando la víctima y la menor manipulaban un arma de fuego.

La medida dispuesta ayer se sustenta en que la defensa planteó que la menor se encuentra sin contención familiar como para atravesar el encierro en un instituto.

En ese sentido, el defensor oficial Berenguer indicó que “en principio la medida sería por 15 días” aunque todo indica que se prolongará y luego “intervendrá el fuero de Familia”.

“El traslado aun no se efectivizó ya que se está buscando cupo de alojamiento para la menor”, precisó el defensor.

Del expediente se desprende que el día del hecho, la niña estaba junto a la víctima y otro adolescente en uno de los monoblocks ubicado en las calles 18 y 529.

Ricardo Daniel Lezica, de 32 años, fue encontrado muerto en un departamento del segundo piso del monoblock número 9.

Algunas versiones indican que la víctima y la menor habrían estado ingiriendo pastillas y el disparo se habría producido en el marco de una manipulación del arma de fuego secuestrada en el lugar.

Testigo de oídas y elementos robados en la casa

Había un chico que al momento del hecho se encontraba en la misma vivienda. Ante la fiscal dijo que estaba en otra habitación, y al escuchar el disparo se asomó a la escena del crimen y vio a la chica intentando ayudar al hombre baleado en la cabeza.

Algunos testigos vieron a la menor cuando salía corriendo del departamento de la víctima, donde se encontraron varios elementos que se presumen de procedencia ilícita como un LCD, dos notebooks, una balanza de precisión y elementos de corte de cocaína, una bordeadora naftera, una carabina calibre 22, varios proyectiles y un chaleco antibalas que dos meses atrás le habían sustraído a un policía de su auto y otros.

La adolescente fue demorada por Personal de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) de La Plata en la calle 35, entre 151 y 152, del barrio Malvinas, pese a que también vivía en La Favela.

La defensa aduce que entre la chica y la víctima preexistía una buena relación, sin historial previo de violencia, lo cual imprime mayor misterio al caso.

Con intención o por accidente

La medida restrictiva de la libertad o de seguridad dispuesta el jueves por la jueza de garantías Inés Siro del fuero de responsabilidad juvenil, tenía un plazo perentorio de cinco días.

La magistrada también dispuso una pericia psicológica y psiquiátrica a instancias del defensor Ricardo Berenguer.

Entre los móviles que manejan los investigadores, uno de ellos adhiere al planteo de la defensa en torno a un presunto disparo accidental. El otro, a un posible episodio vinculado a una vieja historia de violencia.

La menor fue involucrada cuando varios vecinos, tras escuchar un fuerte estruendo en la casa de la víctima, la vieron salir corriendo del lugar con sus ropas ensangrentadas.

La chica es inimputable y no puede ser sometida a un proceso penal, pero sí, de acuerdo a su estado psico-físico, de considerarse que puede ser peligrosa para sí o para terceros, es pasible de una restricción de la libertad en una institución adecuada para su tratamiento.

Fuente: Diario Hoy