Lo dijo el consejero de la Magistratura Alejandro Fargosi. Y agregó que ese organismo fue el «único freno» al Gobierno en nueve años de gestión.
El consejero de la Magistratura Alejandro Fargosi afirmó hoy que «el Gobierno encontró en el Consejo el único freno en sus nueve años de gestión, por eso quiere arrasar con él».
Además, aseguró que con la aprobación en el Senado del proyecto que amplía el número de miembros del organismo y prevé su elección mediante el voto popular «un juez va a pasar a ser un empleado». Fargosi también sostuvo que el proyecto de modificación del Consejo de la Magistratura que el kircherismo convirtió en ley el pasado miércoles «es inconstitucional y arrasa con la división de poderes» y advirtió que «con jueces amigos, la Justicia va a terminar mal».
Además, remarcó que el kircherismo «no puede llegar al límite de discutir que la Constitución marca un sistema tripartito de poderes» y remarcó que hoy «el poder ejecutivo está dominado por una familia».
«Acá lo que se trata es de poner frenos al poder. De no dejar que alguien tenga todo el poder. El Gobierno encontró en el Consejo de la Magistratura el único freno en sus nueve años de gestión, por eso lo quiere arrasar utilizando argumentos falaces», sentenció el consejero a radio América.
En este sentido, Fargosi manifestó que «sería interesante que la Presidenta (Cristina Fernández) escribiera una tesis sobre los argumentos de la reforma judicial» impulsada por el oficialismo porque, sostuvo, «el Estado siempre es el más fuerte».
En una ajustada votación, el oficialismo aprobó por 38 votos a favor y 30 en contra el polémico proyecto que amplía el número de miembros del Consejo y establece la elección popular de los representantes de abogados, jueces y académicos.
Fuente: Clarìn