Piden el fin de la intervención en un sindicato; expectativa por un acto de la Presidenta en la provincia
Por Mariela Arias | LA NACION
RÍO GALLEGOS.- Los trabajadores petroleros del norte de Santa Cruz lanzaron ayer un paro por tiempo indeterminado reclamando el fin de la intervención en el sindicato petrolero, que se encuentra inactivo en la provincia desde el año 2011. Mientras tanto, desde la Casa Rosada siguen con atención el conflicto que envuelve la zona norte santacruceña, dado que la presidenta Cristina Kirchner tiene previsto viajar a Las Heras para acompañar a Miguel Galuccio, el CEO de YPF.
Desde el jueves pasado, trabajadores petroleros de Caleta Olivia, Pico Truncado y Las Heras hacen una huelga por tiempo indeterminado. Según los voceros de la protesta, YPF y Sinopec Argentina «decidieron paralizar la producción» en el marco de este conflicto.
La jefa del Estado, quien se encuentra en Santa Cruz, tiene previsto el lunes al mediodía viajar a Las Heras y participar junto a Galuccio de un acto en un gimnasio, en el cual el número uno de YPF anunciaría acciones en beneficio de la ciudad, entre las que se encuentra Wi-Fi gratis para toda la localidad, la puesta en funcionamiento de la terminal de ómnibus y el anuncio de equipamiento para el hospital local, entre otras.
Desde la Casa Rosada reconocieron a LA NACION que el acto del lunes estaba sujeto a la evolución del conflicto petrolero que se desató luego de que la Federación Argentina Sindical del Petróleo y Gas Privados decidiera días pasados continuar con la intervención que se iniciara el 22 de abril de 2011, luego de que un conflicto salarial y gremial paralizara la producción durante 21 días en la provincia. Ayer, el jefe de Gabinete de Santa Cruz, Ariel Ivovich, advirtió que desde que se inició el conflicto se estimaba la pérdida de producción de 4000 m3 de petróleo, lo cual implicaba, según sus cálculos, cerca de 1,5 millones de dólares.
«De ese monto, la provincia tendrá una pérdida sólo en concepto de regalías de 250 mil dólares», afirmó ayer en conferencia de prensa. Ivovich aclaró que, en este nuevo conflicto, «Santa Cruz es la más perjudicada»; sin embargo, aclaró que por ahora la baja de producción no va a afectar en forma directa la economía de Santa Cruz, dado que la pérdida se ve compensada por ahora con la cuotas de canon que ingresan a partir de la renegociación petrolera de octubre pasado. Sin embargo, desde el gobierno provincial siguen con preocupación el conflicto desatado en el norte de la provincia.
Si bien Ivovich aclaró que el gobierno santacruceño no había intervenido hasta el momento para destrabar el conflicto, adelantaron que el Ministerio de Trabajo de la Nación y la Federación Petrolera buscarán un acuerdo para llamar a elecciones en el sindicato y destrabar el conflicto.
Por su parte, el vicegobernador santacruceño, Fernando Cotillo, y el intendente de Caleta Olivia, José Manuel Córdoba, -ambos enfrentados con Peralta- afirmaron ayer que autoridades del Ministerio de Trabajo de la Nación «recibirán a los trabajadores el próximo martes y se analizará el pedido de fin de la intervención, con un cronograma electoral para definir la conducción gremial».
La decisión de los operarios de continuar con la medida de fuerza fue ratificada en asambleas realizadas en Cañadón Seco y Caleta Olivia. «Unos 1500 trabajadores estamos de vigilia al costado de la ruta, pero sin acceder a los yacimientos. La zona norte de Santa Cruz tiene parada la producción», puntualizó Rubén Retamozo, ex delegado normalizador del gremio santacruceño..
Fuente: LA NACION