La Paz, 1 mar (PL) El presidente Evo Morales consideró hoy como un triunfo la liberación sin culpa de los tres soldados bolivianos detenidos injustamente en Chile y exigió disculpas para los militares.
Chile llama a Bolivia a evitar nuevos incidentes fronterizos
En libertad los tres soldados bolivianos arrestados en Chile
Frente a la soberbia y a la prepotencia, la verdad se impone y esta liberación sin culpa, una liberación sin condena, es el triunfo de la dignidad del pueblo boliviano, manifestó el mandatario durante un acto celebrado en la central ciudad de Cochabamba.
Según destacó, los soldados fueron víctimas de la soberbia de algunas autoridades del Gobierno chileno.
Durante la entrega de dos aeronaves en la base aérea de Cochabamba, el jefe de Estado celebró la determinación de la justicia chilena, que otorgó libertad pura y simple a los soldados José Luis Fernández, de 18 años, Augusto Cárdenas (19) y Alex Choque (20).
Los tres fueron detenidos por los carabineros de Chile el pasado 25 de enero, en el sector de Colchane, en la región de Tarapacá, a mil 987 kilómetros al norte de la capital chilena, cuando perseguían a unos contrabandistas de autos y fueron imputados por portación de arma de guerra e ingreso a suelo chileno por paso no autorizado.
Morales demandó al Gobierno de Chile, presidido por Sebastián Piñera, que pida perdón a los soldados, en el marco de la integración latinoamericana y el respeto a los pueblos.
Si Chile practica la integración o tienen el interés de integrarse con Bolivia, lo mejor que puede hacer el Gobierno de ese país es pedir perdón a los tres soldados, de esta manera se entenderá que es un buen vecino, un Gobierno que está dispuesto a trabajar de manera conjunta, argumentó.
Consideró que la justicia chilena para salvar su responsabilidad hizo maniobras en temas jurídicos para inculpar a los tres soldados que valientemente rechazaron las imputaciones para lograr su liberación.
El mandatario reconoció el acompañamiento de algunos movimientos sociales, artistas, instituciones y autoridades electas chilenas que expresaron su repudio frente a ese hecho injusto.
También destacó la unidad del pueblo boliviano, las instituciones, los movimientos sociales y la comunidad internacional que, a su juicio, permitió que los soldados sean liberados.
La detención de los tres conscriptos bolivianos, recluidos durante más de 30 días en un penal de máxima seguridad chileno, causó divergencias entre ambas naciones, hasta alcanzar el punto más crítico de la relación bilateral.
El Gobierno de Morales aseguró que Chile utilizó a los soldados como rehenes políticos en represalia por la reivindicación de Bolivia de recuperar una salida al mar que perdió con su vecino en la llamada guerra del Pacífico a fines del siglo XIX.