Acuerdos de precios: ilegales y con rotundos fracasos


María Colombo, secretaria de Defensa del Consumidor de la Nación.
Argentina tiene larga experiencia en el uso de este instrumento. En todos los casos desencadenaron en crisis. Aquí la cronología y una perlita.

Históricamente los acuerdos y congelamientos de precios para contener la inflación terminaron en la Argentina con resonantes fracasos. Además, la Ley de Defensa de la Competencia los prohíbe.

Una vez más se anunció en estos días una serie de acuerdos de precios entre el Gobierno, impulsados por la Secretaría de Comercio Interior que comanda Guillermo Moreno, y supermercadistas, distribuidores, casas de electrodomésticos y algunas asociaciones y cámaras empresarias del país como forma de hacer frente a los efectos de la alta inflación. El objetivo oficial es enfriar los precios en un intento por moderar las pretensiones de aumentos salariales en las próximas negociaciones paritarias. Todo en un año de elecciones como es 2013.

Pero en Argentina existe una larga experiencia en el uso de este instrumento, destaca un informe del Centro de Estudios de la Nueva Economía de la Universidad de Belgrano. A continuación, una sintética reseña de los principales intentos anteriores, el período en que se aplicaron y su desenlace:

-Año 1967-69. Plan Krieger Vasena. Acuerdo de precios con empresas líderes. Finalizó con el Cordobazo en marzo de 1969.

-Año 1973-75. Plan Gelbard. Pacto Social. Culminó con el Rodrigazo en junio de 1975.

-Año 1985-1989. Plan Austral, Australito y Plan Primavera. Comenzó con control de precios que luego fue reemplazado por acuerdos con empresas líderes. Finalizó con la hiperinflación de 1989 y el alejamiento anticipado del presidente Raúl Alfonsín.

-Año 2006-2007. Acuerdo de precios con supermercados y empresas líderes. Al dispararse la inflación en enero de 2007 se optó por la manipulación de los índices de precios del Indec por parte de Guillermo Moreno.

Vuelta al ruedo
Luego de un período con precios más o menos controlados por la Secretaría de Comercio Interior en torno al 25% anual real, aunque el Indec diga que ronda el 10%, se retorna ahora a un acuerdo para congelar los precios por un lapso de 60 días. Como siempre, frente a este esquema surgen dos interrogantes:

1. ¿Cómo se garantiza que los productos con precios congelados no desaparezcan del mercado?

2. ¿Qué ocurrirá a partir del día 61?

De aquí al 1 de abril cada uno de los consumidores de la Argentina tendrán la respuesta cada vez que vayas al supermercado a hacer sus compras. En este caso, los riesgos son que haya desabastecimiento, porque muchas empresas pueden optar por no vender sus productos a precios controlados y esperar a que llegue abril o la liberación de precios para sacarlos. El otro riesgo es que se empiecen a aplicar y se generalicen políticas de racionamiento de productos. Esto es que no se deje comprar más de una o dos unidades por producto para evitar el acopio y la especulación.

Mientras tanto, desde la Universidad de Belgrano señalan una curiosidad. Es que los acuerdos de precios que firma el Gobierno, por medio de la Secretaría de Comercio Interior, son violatorios del artículo 2º de la Ley de Defensa de la Competencia que, en su inciso a) prohíbe “fijar, concertar o manipular en forma directa o indirecta el precio de venta, o compra de bienes o servicios al que se ofrecen o demanden en el mercado”.

Curiosamente es la Secretaría de Comercio Interior, o sea Guillermo Moreno, a la que le corresponde velar por el cumplimiento de esta ley.

Negación total
La subsecretaria de Defensa del Consumidor, María Colombo, aseguró hoy que en el país «no hay control de precios», ni un proceso inflacionario.

Según la funcionaria, «acá no hay control de precios. El lunes pasado se ha consolidado un acuerdo entre la Secretaría de Comercio Interior y los supermercados para que los productos cuesten lo mismo desde el primero de febrero hasta el primero de abril».

«Nosotros hacemos un seguimiento de precios y nuestra información no es la de los medios. El norte que guía la acción de nuestro Gobierno es cuidar la capacidad adquisitiva de las familias. Este acuerdo, es una herramienta en ese sentido», enfatizó Colombo, informa hoy la agencia NA.

En declaraciones radiales, la funcionaria garantizó que «de acá a abril no va a aumentar nada ni habrá desabastecimiento», y resaltó que la Argentina, en materia de precios, «es bastante estable, gracias a que tiene una conducción que sabe dónde vamos».

«Los empresarios en Argentina tienen una situación de privilegio, porque tenemos en el país un proyecto de producción y consumo popular», señaló.

Además, descartó que el Gobierno haya prohibido hacer publicidad en los diarios a las grandes cadenas de supermercados, mientras esté vigente el acuerdo de precios.

«La prohibición de publicar avisos en los medios es un invento de Clarín», consideró Colombo.

De hecho, en varios matutinos porteños de este viernes, la cadena de supermercados fue la única que Coto publicó avisos, de varias páginas, para promocionar sus productos, desde alimentos hasta electrodomésticos.

Clarín y La Nación denunciaron que los supermercados que habitualmente anuncian en sus ediciones de fines de semana, retiraron los avisos por una orden del secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno.

Según esos matutinos -en los cuales este viernes se publicaron avisos de Coto- habría represalias y sanciones para las cadenas que decidan pautar en la prensa gráfica.
mdzol.com