Un publicista condenado a más de 40 años de cárcel dijo que el ex presidente se quedó con parte del dinero obtenido ilegalmente para financiar sus gastos personales.
Brasil vive hoy un nuevo seísmo político, después de que uno de los 25 condenados en el juicio por actos de corrupción del gobernante Partido de los Trabajadores (PT) implicara directamente en el escándalo al ex presidente Luiz Inacio Lula da Silva.
Las acusaciones del publicista Marcos Valerio de Souza -condenado por el Supremo Tribunal Federal (STF) a más de 40 años de cárcel- fueron formuladas en septiembre en un testimonio secreto al Ministerio Público, cuyo tenor fue revelado hoy por el diario conservador «O Estado de Sao Paulo».
Según Valerio, quien fue apuntado por la Corte Suprema como el operador del esquema ilícito bautizado de «mensalao», Lula da Silva se apropió de parte del dinero obtenido ilegalmente para financiar gastos personales, y también avaló la toma de préstamos a bancos favorecidos por el gobierno para alimentar los pagos de sobornos a legisladores aliados.
Además, el publicista sostuvo que un miembro del PT lo amenazó de muerte para evitar que formalizara sus denuncias, y que el partido gubernamental pagó a su abogado honorarios por casi dos millones de dólares, para financiar su defensa en el proceso realizado por el STF.
Lula da Silva, quien está actualmente en Europa, no comentó las acusaciones de Valerio, que fueron rechazadas hoy con vehemencia por el presidente del PT, Ruy Falcao, quien sostuvo que las denuncias son «una serie de mentiras».
«Este es un intento más de incriminar al presidente Lula y de criminalizar el PT. Los medios no deberían creer en alguien que, tras ser condenado, intenta reducir sus penas lanzando calumnias contra el PT», sostuvo el dirigente.
En las filas de la oposición, las denuncias del publicista reavivaron las esperanzas de implicar directamente a Lula da Silva en el escándalo que estalló en 2005, poco más de dos años después de que asumiera el gobierno.
El líder del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) en el Senado, Álvaro Dias, anunció hoy que buscará invitar Valerio a declarar ante la Cámara Alta sobre el testimonio dado a la Fiscalía. Según Dias, los nexos de Lula con el escándalo representan «el capítulo aún no escrito del ‘mensalao’, y este capítulo debe ser escrito por exigencia nacional».
Asimismo, el líder del Partido POpular Socialista (PPS) en la Cámara Baja, Rubens Bueno, afirmó que la agrupación analiza la posibilidad de invitar Lula a declarar ante la Casa legislativa.
«Siempre hubo una sospecha fuerte de que él (Lula) era el gran jefe de todos. El reportaje de ‘O Estado (de Sao Paulo’ confirma todo lo que se decía sobre él. Ahora, él debe explicarse», argumentó.
Los políticos opositores admiten, sin embargo, que difícilmente lograrán votos suficientes para aprobar invitaciones a Lula o a Valerio, ya que la coalición oficialista comandada por el PT y por el centrista Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB) tiene amplia mayoría en ambas Casas del Congreso.
El presidente del PMDB, el senador Valdir Raupp, dejó hoy en claro que su partido no avalará investigaciones parlamentarias sobre las denuncias de Valerio: «Creo que lo mejor es dejar (la investigación) en el ámbito del Ministerio Público».
Fuente: Dpa