Cumbre Asia-UE arranca evidenciando distintas velocidades económicas

La cita se da al amparo de una realidad: Europa está en crisis y Asia en pleno crecimiento. Se espera que el encuentro de dos días se centre en la crisis de deuda en Europa y las disputas territoriales de China con sus vecinos en el Mar de la China Meridional y termine con una declaración final el martes en defensa del libre comercio.

La cumbre que reúne a los jefes de Estado y gobierno de Asia y Europa (ASEM) comenzó hoy en Vientiane, Laos, con la acogida de tres nuevos miembros -Noruega, Suiza y Bangladesh- y dejando en evidencia el contraste entre la contracción de las occidentales y el crecimiento de las economías asiáticas.

«No negamos que las perspectivas de crecimiento en Europa en el futuro próximo no son brillantes», dijo el presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy, en el noveno encuentro Asia-Pacífico en el que participan más de 30 jefes de Estado y gobierno de los 51 miembros del grupo fundado en 1996.

Se espera que el encuentro de dos días se centre en la crisis de deuda en Europa y las disputas territoriales de China con sus vecinos en el Mar de la China Meridional y termine con una declaración final el martes en defensa del libre comercio.

Los europeos dejaron claro su interés en acuerdos de libre comercio con países como India o Singapur, al tiempo que llamaron a China y Japón a solucionar sus conflictos territoriales de forma pacífica.

Van Rompuy comparó la crisis de la eurozona con la que golpeó Asia en 1997-98 y provocó reformas financieras dramáticas en la región. «Al igual que Asia se recuperó de la crisis a finales de los 90 y emergió más fuerte, así lo hará Europa», dijo Van Rompuy. «No deberían confundir el débil crecimiento en Europa con un declive permanente del potencial europeo», señaló, al tiempo que garantizó que la Unión Europea seguirá siendo un «socio fuerte» para Asia.

Van Rompuy pidió a los gobierno asiáticos que continúen políticas para favorecer el libre comercio y evitar el proteccionismo, dijo alegando que el comercio bilateral entre los dos continentes se cifró en un billón de dólares el año pasado.

El primer ministro chino, Wen Jiabao, advirtió por su parte de los riesgos que aún existen para la economía mundial y señaló que la crisis financiera aún no ha pasado. Además, se pronunció abiertamente a favor de un comercio mundial abierto, acuerdos políticos, esfuerzos comunes científicos y tecnológicos y una regulación de la economía mundial como motor para un nuevo crecimiento.

Asia es la región más dinámica del mundo, pero Europa sigue siendo un importante pilar de la economía. «Mientras colaboremos, podremos dominar nuestra responsabilidad de impulsar más crecimiento», dijo Wen.

Asia es una «fuerza motriz» para la economía mundial, dijo por su parte el primer ministro noruego, Jens Stoltenbeg, tras la adhesión oficial de Noruega al club del ASEM.

Con los tres nuevos miembros, Noruega, Bangladesh y Suiza, la ASEM está integrada por 49 países, la ComisióN Europea y la Asociación de Naciones del sudeste Asiático (ASEAN).

«Hoy nuestros barcos se construyen en Asia y tenemos cada vez más negocios en esta región», dijo Stoltenberg, que destacó que el fondo nacional noruego Wold invertió unos 80.000 millones de dólares en al región.

Entre los 22 primeros ministros y nueve jefes de Estado que se desplazaron a Laos se encuentra el presidente francés, François Hollande, llegó el lunes a Laos, donde permanecerá 12 horas. También está en Laos el jefe de gobierno ruso, Dmitri Medvedev, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso o el secretario general de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), el tailandés Surin Pitsuwan.

La ASEM fue creada en 1996 en Bangkok para mejorar los lazos entre las economías avanzadas de Europa y las economías de rápido crecimiento asiáticas.

El noveno encuentro en Laos se celebra bajo el lema «Amigos para la paz, socios para la prosperidad». Entre los temas de la cumbre se cuentan la crisis de la eurozona, temas de seguridad y medio ambiente, así como el compromiso conjunto para evitar el proteccionismo. El próximo encuentro se celebrará en dos años en Europa.

El este de Asia ha registrado un fuerte crecimiento este año a pesar de la crisis en Europa, lo que convierte a la región en un importante mercado para los bienes europeos.

«Las empresas europeas parecen bastante optimistas ante la región», dijo Viraphonh Virawong, viceministro de Energía de Laos, quien el domingo asistió a un encuentro empresarial en el marco de la ASEM. «El futuro está aquí y nuestros países son generalmente estables y predecibles», añadió.

Incluso al anfitrión Laos, una de las economías más pobres del mundo, parece irle bien. El país con seis millones de habitantes prevé un crecimiento económico del 8 por ciento este año, ante un fuerte impulso del consumo, al menos en la capital.

Fuente: Dpa.