Alimentos, bebidas, verduras y cortes de carne conformarán, entre otros, un listado que se publicará en la página web de un organismo oficial que depende del Secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno. Esta canasta de precios rebajados convivirá con los controles de precios que viene aplicando el funcionario desde hace tiempo y que pocos resultados han dado, al menos, en las versiones no oficialistas.
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24) A poco de partir hacia Vietnam, destino exótico para el comercio si los hay, Guillermo Moreno dejará a cargo de la Subsecretaria de Defensa del Consumidor, su alfil María Lucila ‘Pimpi’ Colombo, el protagonismo del debut de la nueva canasta de alimentos que impulsa el Gobierno como herramienta para contener la inflación.
Todo un contrasentido para un Gobierno que dice no creer en este fantasma pero que se empeña en combatirlo… hasta ahora sin mucho éxito.
El «evento» será este mediodía, y traerá como mayor novedad respecto a proyectos anteriores del más polémico secretario del Gobierno, que esta vez la canasta será publicada en una página web de Defensa del Consumidor y vendrá acompañada por un geolocalizador, que permitirá que cualquier persona acceda a la información acerca del lugar más cercano a su hogar en el que puede encontrar esas ofertas.
Para la presentación fueron convocados desde los grandes fabricantes de alimentos hasta las cadenas de supermercados, pasando por los autoservicios chinos, los mayoristas y las asociaciones de defensa del consumidor afines al Gobierno.
El proyecto de Moreno se empezó a gestar hace más de tres semanas y el principal punto de discusión fue la definición de la lista de productos que integran la canasta. Hasta última hora de ayer, los supermercados y Comercio Interior seguían negociando hasta alcanzar la nómina final de 350 productos de la canasta básica, incluyendo alimentos, bebidas, artículos de tocador y de limpieza.
Aunque, en la práctica, el nuevo listado abarcará a muchos menos del 3,5% de los entre 10.000 y 15.000 productos que se distribuyen en las góndolas de los supermercados en todo el país, según el diario ‘El Cronista’. Por lo tanto, es probable que el objetivo de este nuevo intento por aplicar un cepo a los precios mediante una especie de control a medias, termine diluyéndose con el tiempo, como ya ocurrió con otras creaciones de Moreno.
De la partida inicialmente están participando las principales cadenas de supermercados de alcance nacional, como Carrefour, Walmart, Coto, Jumbo, Disco y VEA, y las regionales más grandes, como La Anónima, Toledo y la Cooperativa Obrera. Los autoservicios chinos también fueron tentados por Moreno, según ‘La Nación’, aunque al menos en un primer momento no se sumaron a la iniciativa.
En todos los casos, los precios que figurarán en la web oficial de Defensa del Consumidor no serán fijos ni uniformes y la idea es que cada cadena pueda seguir estableciendo libremente el precio de cada artículo que integre la lista de ofertas. Con este modelo, el objetivo de Moreno es fomentar la competencia entre las distintas cadenas para ver cuál ofrece los mejores precios finales.
Esta canasta convivirá con los controles de precios que viene aplicando Moreno y que hasta ahora, claro está, no alcanzaron para contener a la inflación, que este año volverá a cerrar por encima del 23%, según las mediciones de consultoras privadas y de provincias. Lejos de las cifras que muestra el Indec, al que, salvo el Gobierno, ya nadie le adjudica credibilidad.