El rol de Zuckerberg, bajo la lupa de Wall Street

Con las acciones de Facebook a US$ 21, la bolsa de EEUU duda de su capacidad como CEO en la red social. Por qué Google y Twitter son dos casos precedentes

Por primera vez desde que debutó en la bolsa, las acciones de Facebook cotizaron por debajo de los US$ 20 la semana pasada. Este valor –lejos de los US$ 38 con los que comenzó a cotizar en Nasdaq- hace crecer la presión para que Mark Zuckerberg se plantee su liderazgo como Chief Executive Officer (CEO) frente a la red social.

El joven de 28 años ya había dicho que no seguiría los designios de Wall Street, sino que seguiría manejando la empresa con una filosofía de largo plazo. Pero el actual nivel de los títulos pone nervioso a los inversionistas, según publica la revista Time. “Zuckerberg puede ser un visionario, pero los visionarios no siempre son buenos CEOs”, plantea la publicación.

Y cuando se trata de una compañía que cotiza en Bolsa, debe estar a la altura de las circunstancias, puesto que el modelo de negocios y el potencial de crecimiento están en juego. El viernes pasado los títulos se estabilizaron en 21 dólares, luego de cinco días de caída que se comieron el 30% de su capitalización bursátil.

Tanto Google como Twitter se presentan como dos casos precedentes para entender que el fundador de Facebook no necesariamente tiene que ser un buen CEO. Larry Page, uno de los fundadores del buscador, estuvo al frente de la empresa durante los primeros tres años. Pero Eric Schmidt pasó al mando cuando la empresa comenzó a cotizar en Nasdaq.

Desde abril de 2011, Page volvió a estar al frente de Google. ¿Por qué este cambio repentino? Schmidt indicó que Page ya era un CEO maduro, y podría llevar al frente una empresa con ingresos anuales alrededor de los US$ 38.000 millones. Los fundadores de Twitter también dejaron a Dick Costelo la gestión diaria de la red de microblogging, aunque todavía no cotiza en bolsa.

El impacto negativo en las acciones hoy también afecta a la fortuna de Zuckerberg. Según El País, el empresario quedó fuera del grupo de las 10 mayores fortunas de la industria tecnológica elaborado por Bloomberg, y pasó de US$ 16.000 millones a 10.600 millones dólares.

Fuente: Infobae