Acusarían de asociación ilícita a ferroviarios detenidos

Guillermo Armando Uño trabaja como “picaboletos” de la estación Clypole y es el séptimo detenido por el crimen del militante del Partido Obrero, Mariano Ferreyra. Indagado ayer por la jueza Susana Wilma López y la fiscal Cristina Caamaño, negó las acusaciones en su contra y dijo que no vio quién disparó a Ferreyra.
Uño, como los otros seis detenidos, quedó acusado de integrar una “asociación” para impedir el corte de las vías del ferrocarril el 20 de octubre. El ex barrabrava Cristián Favale es el más comprometido, pero todos los imputados podrían ser acusados de asociación ilícita cuando se defina el procesamiento.
Afiliado a la Unión Ferroviaria, Uño admitió ante la justicia que participó del enfrentamiento entre empleados tercerizados del Ferrocarril Roca y ferroviarios, pero negó haber portado armas e integrado la patota que disparó contra Ferreyra.
Fuente: larazon