El lunes el Gobierno comenzará a ejecutar un plan de 60 días para renovar las vías en el tramo Ramos-Once y reparar 24 formaciones, con una inversión de 800 millones. Pero la obra aún no fue adjudicada y los delegados estiman que no se llegará con los tiempos. El escándalo en puerta por la señalización automática y el inminente anuncio para el Mitre.
El plan de obras para el tren Sarmiento por el que el Gobierno nacional invertirá 800 millones aún no comenzó y ya estiman que no podrá cumplir los plazos que anunció Florencio Randazzo. La renovación de vías y de la señalización se extendería más de lo provisto, y el nerviosismo se apodera de los pasillos del ministerio del Interior y Transporte.
La semana pasada el ministro del Interior y Transporte anunció que a partir del 30 de julio se suspenderá el servicio todos los días en el tramo Moreno-Once desde las 22 a las 4, y durante todo el domingo desde Liniers hasta Once.
Con la suspensión del servicio nocturno del Sarmiento por 60 días el Gobierno espera completar la renovación de las vías en el trayecto que va desde Ramos hasta Once, la reparación de unas 24 formaciones y la modernización del sistema de señalización en toda la línea.
El problema principal es que las obras aún no fueron adjudicadas, y un proceso de licitación atentaría contra los tiempos que prometió Randazzo en conferencia de prensa. Por eso, el Gobierno está analizando la conformación de un fideicomiso para realizar una contratación directa por concurso de precios. Así podrían resolver en parte las demoras, a costa de elegir un proceso menos transparente.
El delgado del Sarmiento, Rubén “Pollo” Sobrero, estimó ante LPO que las obras se podrían realizar igual sin cortar el servicio nocturno, teniendo trenes cada media hora. Aunque advirtió que de ninguna de las dos formas el plan de obras que anunció el Gobierno se podrá finalizar en el plazo de 60 días.
Esta mañana, un grupo de gremialistas encabezado por Sobrero se reunió con funcionarios del ministerio para coordinar cómo se organizarán a partir del lunes. «Notamos que están desorientados. Hoy sólo pudimos hablar sobre los colectivos que van a poner en las estaciones para que la gente pueda viajar. Pero va a ser muy difícil que no colpase todo, porque en cada tren viajan 2.000 personas», explicó uno de los delegados.
Y luego agregó: «Les preguntamos cómo harían para volver los trabajadores del sector de señalética que trabajan a lo largo de todo el tendido. Ellos siempre regresan con los trenes. ¿Y ahora? Todavía no hay respuesta al pedido de que pongan combis para el personal».
Rumores
Además de las obras de renovación de las vías y la reparación de las formaciones, el Gobierno quiere saldar una vieja deuda con la construcción de un Sistema de Señalamiento Automático, que contemplaba un sistema de señalización previo a la instalación de un servicio de frenos automáticos.
Esa obra, aprobada en 2006 por la Secretaría de Transporte, fue adjudicada a la multinacional Siemens. Pero la empresa interrumpió la obra en 2009 y el Gobierno nacional jamás le exigió que la terminara, pese a que la firma cobró 51 millones de pesos de anticipo por una obra que dejó en el 4 por ciento de terminación.
Algunos rumores indican que Randazzo podría anunciar una nueva licitación en los próximos tres meses, por lo que la multinacional Siemens se habrá quedado con 51 millones de pesos del Estado sin haber concluido ni la vigésima parte de la obra.
Además, según pudo saber LPO, sería inminente el anuncio de un plan de obras para la línea Mitre. Los problemas podrían repetirse, con el lanzamiento de reformas que aún no fueron licitados.
lapoliticaonline.com