El 59% de los encuestados on-line se oponen al cambio de nombre de la calle Roca

Obvio, renunció la titular de Toponimia. Un capítulo más se escribe hoy, sobre la bochornosa y frustrada intención de los Concejales oficialistas de Río Gallegos por cambiar el nombre de la calle Julio Argentino Roca por Néstor Carlos Kirchner. Una encuesta de lectores de OPI arroja una cifra lapidaria: el 59% de los encuestados rechaza el cambio de denominación. Ante la falta de respeto a las instituciones, Edda Zanarello de Mauprivez, titular de Toponimia, renunció. Hace 10 años está frente a la Comisión.

Inmediatamente de conocida la resolución del Concejo Deliberante de Río Gallegos, sobre el cambio de nombre a la calle Julio Argentino Roca por la de Presidente Néstor Carlos Kirchner, OPI propuso una encuesta on line que aún está vigente y en cinco días logró que más de 1.500 lectores expresen su voluntad.

La pregunta indica ¿Ud piensa que el nombre de la actual calle Julio Argentino Roca debe ser cambiado por otro nombre?. Hasta este momento los resultados son irrefutables: Sobre un total de 1.538 votos ( a las 10:00hs) el 59% (903 Votos) propone que no se cambie el nombre, el 26% (397 Votos) que sea cambiado por el de Néstor Carlos Kirchner, el 11% (163 Votos) que se cambie por el de Jorge Cépernic y el 4% (75 Votos) dice que les da igual que se cambie o no.

Hoy los Concejales oficialistas, desesperados ante el yerro bochornoso de una sesión inocua que por fallas en los procedimientos llevó a que la Ordenanza no fuera votada reglamentariamente, quieren “enmendar” el error buscando por fuera de una sesión ordinaria, algún tipo de mecanismo que les permita consumar su capricho, a espaldas de cualquiera que intente oponérseles. Para ello, pretenden mantener una reunión a puertas cerradas con los ediles de la oposición que han manifestado oponerse al proyecto nunca votado en el recinto del Concejo Deliberante.

Sin respetar los pasos procedimentales a seguir para la aprobación de una Ordenanza de este tipo, sin consultas previas, sin enviarlo a Comisiones y sin tener en cuenta lo que piensa la gente en relación con este cambio de denominación de la principal calle de la ciudad, los Concejales del FPVS, encabezados por Pablo Grasso, juegan sus cartas y apuestan a que obtendrán facilidades de parte de sus pares de la oposición y del propio Intendente Héctor Roquel que ni siquiera los propios Radicales, saben cómo reaccionará si la norma llega a su escritorio. Se muestra tan dubitativo, indeciso y poco consistente en las declaraciones que ha efectuado sobre el tema, que muchos creen, podría aprobar la norma como llegue, con el fin de no cruzarse con el oficialismo que es mayoría.

Sin embargo y tal como dejó trascender hoy el diario La Opinión Austral, la titular de la Comisión de Toponimia, anunció su renuncia al cargo y de la misma manera podría generarse una renuncia masiva de los demás miembros, ante la falta de respeto a las instituciones, que han cometido los Concejales del PJ, toda vez que el organismo fundamental de decisión que debe expedirse sobre el cambio de la nomenclatura, no solo no fue consultado, sino que fue literalmente desconocido y dejado de lado en esta decisión, vulnerando todos y cada uno de los procedimientos.

Edda Zanarello de Mauprivez, que lleva 10 años al frente de la Comisión de Toponimia, creada en el año 2000 y le dijo a LOA “Si para el cambio más importante de nombre de calle que puede tener la ciudad no se nos hace participes, no queda más que irme a mi casa”; luego agregó “en el caso del Dr. Kirchner en particular y sin abrir juicio sobre los valores y calidades de un santacruceño que llegó a Presidente de la República, sino en el sentido de la tarea que a nosotros nos corresponde, nunca nos preguntaron ni nos enviaron la documentación que el Concejo Deliberante habitualmente manda”.

El despropósito en el que han incurrido los Concejales del FPVS de Río Gallegos, deja a la institución del HCD con un bajo índice de calidad ante los ojos de los vecinos que ven como, además de la ineptitud para cumplir las funciones asignadas, quienes fueron elegidos para representar a sectores de la ciudad, arremeten contra la legalidad y las normas instituidas (de las cuales ellos son los responsables y gestores como legisladores comunales), solo con el objetivo de hacer cumplir lo que ellos consideran no debe ser objetado por nadie, ni merece que los institutos creados para intervenir con su opinión, tengan participación en las decisiones que han tomado.
Fuente: Agencia OPI Santa Cruz