La masiva protesta ecologista logró retrasar al Castor. El tren que viajaba de Francia a Alemania con residuos nucleares acumulaba horas de retraso provocadas por las decenas de acciones, bloqueos y manifestaciones de organizaciones ecologistas, que durante dos días han tratado de impedir que el polémico tren llegue a su destino: el depósito provisional de residuos de Gorleben, en Baja Sajonia.
El convoy, que salió el viernes desde el centro de procesamiento de residuos de La Hague (Francia), tuvo que detenerse en cinco ocasiones desde que entró ayer en territorio alemán. Las autoridades han contabilizado heridos y choques violentos entre los activistas -que han bloqueado los andenes y quemado vehículos blindados- y la policía. Este ha sido definido como el mayor movimiento antinuclear que se ha registrado en las ultimas décadas en Alemania.
Fuente: El País