En línea con los cálculos privados, el organismo de estadísticas detectó en el cuarto mes del año un suave crecimiento de 0,6% respecto a un año atrás. En comparación con marzo, el Estimador del PBI arrojó una baja de 1,3 por ciento. No obstante, el acumulado del 2012 es positivo.
De todas formas, en el acumulado del cuatrimestre el PBI mantiene un avance de 4%, cotejado con similar tramo de 2011, el cual se considera saludable dado el escenario internacional, en general, y de Brasil, en particular.
El cuadro contrasta con el del año anterior, ya que a esa altura la generación de riqueza por parte del conjunto de residentes en el país se expandía a una tasa de 8,8% y 0,7% en el caso puntual del mes.
Según las mediciones privadas, como la del Estudio Ferreres –que también había estimado 0,6% de suba en un año y caída de 1,2% en el mes–, el impulso estuvo traccionado por el sistema financiero, pese al drenaje de los depósitos en dólares, al crecer a un ritmo de 19% anual en abril y 17,4% en el cuatrimestre.
El resto de las actividades dieron cuenta de subibajas en torno al 2%, con la excepción del agro, que por efecto de la sequía y pérdida de competitividad habría caído casi 10% en abril.
Fuente: Infobae